La defensiva de los Patriotas de Nueva Inglaterra exhibieron las carencias de los Halcones de Atlanta y los derrotaron 25-0, una blanqueada que no sufrían hace más de tres décadas en su propio terreno.
Kyle Van Noy fue una pesadilla para Matt Ryan, al que capturó dos veces durante el juego y dio la anotación final en el último cuarto con una intercepción, la segunda de la noche para el mariscal que terminó cazado en cuatro ocasiones pese a tener la rodilla izquierda lastimada y luego relevado, aunque su suplente también fue interceptado.
El novato Mac Jones, quarterback de Patriotas, mandó un pase a las diagonales y sufrió una intercepción, pero Nick Folk estuvo certero con cuatro goles de campo, de 32, 44, 53 y 33 yardas. El pateador falló el punto extra con el touchdown de Van Noy.
El conjunto de Bill Belichick acumula siete triunfos por cuatro derrotas, mientras que Atlanta, que venía de una paliza contra Dallas (43-3), cargó con otro doloroso revés en el inicio de la semana 11 de la NFL.
Atlanta perdió cuatro balones, además de que su pateador, Younghoe Koo, erró un gol de campo de 50 yardas en el segundo periodo. Así, el equipo local dejó sus números en 5-5, para continuar en el sótano de la NFC Sur.
El partido evocó exactamente mil 747 días desde la final en que los Patriotas de Tom Brady le dieron la vuelta al marcador tras ir perdiendo 28-3 en la primera mitad y vencer 34-28 a los Halcones en tiempo extra en el Supertazón 51, pero la de ayer fue otra historia con un Matt Ryan en declive.