París. Brasil debe volver a la escena internacional tras el “aislamiento” en que lo ha puesto Jair Bolsonaro, sostuvo ayer el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, durante una visita a París en la que se ha encontrado con líderes de diversas corrientes, desde la alcaldesa socialista Anne Hidalgo y el dirigente de Francia Insumisa, Jean-Luc Melenchon, hasta el gobernante francés, Emmanuel Macron.
El gobierno de Bolsonaro “ha puesto a Brasil de espaldas al mundo”, aseguró Lula durante una conferencia en la universidad Sciences Po de París.
Macron recibió ayer a Lula en el Palacio del Elíseo. El vocero del gobierno francés, Gabriel Attal, descartó que el encuentro tuviera intenciones políticas, pero “recibir con alfombra roja a alguien que no es presidente también es una manera de presionar a Bolsonaro”, apuntó Carlos Milani, ex diplomático y profesor de Relaciones Internacionales en la Universidad del Estado de Río de Janeiro.
Lula, quien gobernó Brasil de 2003 a 2010, también recibió el premio Valor Político 2021, que entrega la revista francesa Politique Internationale.
El ex mandatario se reunió hace dos días con el futuro canciller alemán, Olaf Scholz, y con Josep Borrell, jefe de la diplomacia de la Unión Europea.
Su gira culminará en España, con un encuentro con el presidente del gobierno, Pedro Sánchez.
El líder de izquierda brasileño lleva ventaja en las encuestas para ganar en los próximos comicios contra Bolsonaro, aunque ninguno de los dos ha declarado oficialmente su candidatura.
Analistas afirman que Bolsonaro tiene una pésima imagen entre los líderes europeos, y como ejemplo de ello señalan que el mes pasado, en Roma, videos de los actos del G-20 mostraron al Ejecutivo brasileño como una figura aislada, quien ni siquiera figuró en la foto de los asistentes, tomada en la fuente de Trevi.
Macron subrayó que “en los últimos tres años, Brasil se ha apartado del sistema multilateral y de importantes acuerdos internacionales”, en clara alusión al tiempo que Bolsonaro lleva gobernando.
El presidente brasileño ha criticado la aplicación de las regulaciones ambientales, hace poco anunció sus intenciones de desarrollar la región amazónica, cuestionó la gravedad del Covid-19 y la efectividad de los confinamientos, sembró dudas sobre las vacunas e impulsó curas no probadas.
Ante cerca de un millar de personas congregadas en la universidad Sciences Po, en París, Lula expresó que el actual gobierno puso a Brasil de espaldas al mundo, de acuerdo con Telesur.
Aseveró que “nadie quiere invertir en Brasil” debido a que Bolsonaro “es grosero con las mujeres, no ama a los negros, quema la selva y es violento con el pueblo autóctono”; además, continuó: “nunca vi pasar hambre a tanta gente en el país como ahora”.