El encuentro de mandatarios de América del Norte programado para pasado mañana debe servir para alcanzar acuerdos y cumplirlos lo más pronto posible, dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Al referirse al propósito de las conversaciones (primero las bilaterales y luego la trilateral) que sostendrá con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, advirtió la necesidad de ir más allá de los conceptos.
Ellos “son hombres de acción. Entonces, no es para ir a conceptualizar o sólo al análisis de la realidad, es para tomar decisiones, porque ellos no están para perder el tiempo, ni nosotros”, advirtió.
En cuanto a su propuesta delineada hace unos días en el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en Nueva York, el mandatario puntualizó que la idea es recaudar entre las personas y naciones con mayores recursos del mundo un fondo para dar a 750 millones de pobres cuatro dólares diarios, adicionales a los dos con los que sobreviven actualmente.
A México le tocaría aportar “60 mil millones” de pesos cada año, acorde con el PIB de cada nación.
“Como comentaba el poeta Díaz Mirón, ‘nadie tiene derecho a lo superfluo mientras existan personas que carecen de lo indispensable’... Es una vergüenza acumular tanto dinero en pocas manos”, señaló.
En los preparativos para el encuentro del jueves en Washington, cuyos ejes son la integración económica, migración y cooperación contra la pandemia, López Obrador se reunió ayer con integrantes del gabinete de seguridad en Palacio Nacional.
Además de los mandos militares y de seguridad federal, llegaron al recinto los titulares de la Función Pública, Roberto Salcedo, y de la dirección de Aduanas, Horacio Duarte, entre otros.
Por la delegación mexicana participarán los secretarios de Relaciones Exteriores, Hacienda y Economía; el comisionado nacional de Migración, Francisco Garduño, y el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell.
El Presidente fue cauto en cuanto a la propuesta de establecer un programa de visas temporales de trabajo, aunque sí recalcó la importancia de las cumbres para obtener resultados y llevar a la práctica los acuerdos.
El mandatario viajará mañana a Estados Unidos, en lo que será su tercera salida al extranjero en lo que va de su gobierno, y pernoctará en la residencia de la embajada de México; al siguiente día volverá al país.
El sábado 20 encabezará el desfile conmemorativo a la Revolución Mexicana, por lo cual, al igual que el año pasado, serán llevados al Zócalo “muchos, muchos, muchos caballos” y ferrocarriles.