Ciudad de México. Varios cientos de personas se dieron cita en las instalaciones de la Secretaría de Bienestar, ubicadas en la alcaldía Xochimilco, para realizar los trámites de solicitud de las “Becas para el Bienestar Benito Juárez”, en un escenario que los solicitantes consideraron de “mucha desorganización”, lo cual dio lugar a momentos de enojo y desesperación entre muchos de los asistentes.
A manera de ejemplo de esta situación, la señora Lizbeth García acudió junto con su hijo Jorge de 16 años de edad, quien tenía una cita a la 01:20 de la tarde pero al no ser atendido a tiempo tuvo que pasar más de una hora formado bajo el sol, lo que le produjo vómito y mareos.
“Mi hijo vomitó por la insolación y porque tiene problemas cardíacos y no puede hacer esfuerzos. (Los organizadores) no están respetando horarios de cita y aquí afuera muchos jóvenes no están vacunados”, lamentó la mujer, quien sin embargo afirmó que hace este trámite porque los 3 mil 200 pesos de ayuda semestral le son de mucha utilidad.
Un par de metros más atrás, Maylet Reyes, de 14 años de edad, yace en el suelo mientras un paramédico le toma el pulso y le administra un suero, mientras un grupo de mujeres la abanica con hojas de papel, luego de que la adolescente se desvaneciera por el fuerte sol de la tarde.
Fotos: Luis Castillo
“Ya llevamos más de dos horas formadas y mi hija se insoló. Teníamos cita a la una, pero nos formamos en una fila equivocada”, lamentó la señora Alejandra Peña, madre de la joven afectada.
Una de las mujeres que trata de ayudar a la adolescente desvanecida comenzó a denunciar a gritos que ella y su hijo llevaban formados desde las nueve de la mañana sin poder concluir el trámite de la beca.
“Seguimos aquí y no se vale, porque nos dicen ‘ le falta un papel, le falta el otro, le falta una foto’, que nos digan si nos van a tender o no”, exigió la solicitante con claras muestras de desesperación.
Elizabeth Lara, madre de Fernanda de 16 años de edad, es una de las personas que logró concluir el trámite, pero después de haber esperado muchas horas y de un proceso que calificó como “muy confuso”.
“Llegamos al veinte para las nueve y mi hija pudo salir a las 02:10 de la tarde, fueron cinco horas. Nosotros no teníamos cita y era una filísima”, denunció la solicitante.
Pasadas las 03:30 de la tarde en el lugar seguía habiendo una fila de al menos quinientos metros de largo.