Provenir de una familia de rebeldes fue una condición determinante en la carrera de Antonio Helguera (1965-202) como caricaturista político, aseguró su colega, maestro y amigo Rafael Barajas El Fisgón en el homenaje póstumo que la alcaldía de Iztapalapa rindió el sábado al monero de La Jornada, como parte de la extensión de la 21 Feria Internacional del Libro en el Zócalo (FIL) en esa demarcación.
“Su mamá era española, de una familia que llegó a México huyendo del franquismo, y su papá, de una familia de ateos proveniente de una región cristera: Lagos de Moreno, Jalisco. Toño venía de esa herencia; era muy chistoso porque, también, venía de una familia académica. Su abuela y su mamá eran maestras en el Colegio Madrid”, refirió el también cartonista de este diario.
“Además, tenía una veta irreverente fantástica. El suyo era un carácter peculiar, todos lo queríamos mucho, porque era adorable, pero también malencarado y grosero.”
Acompañado por sus colegas “chamucos”, los moneros José Hernández y Rapé, El Fisgón recordó que conoció a Helguera cuando éste era un adolescente y asistía al curso que impartía en la Casa del Lago. Desde el primer momento, dijo, reconoció su ingenio, gran sentido del humor y fina capacidad como dibujante. Tantas cualidades le vio para dedicarse al cartón político que lo hizo desistir de su intención primigenia para estudiar leyes.
“Estudió en La Esmeralda y terminó siendo un gran maestro de la caricatura mexicana. Es un dibujante exquisito; su sentido del humor es perfecto; tenía el tino de encontrar la pinche paradoja en todo y plasmarla en trazos muy elegantes”, sostuvo.
“¡Cómo un hombre a veces tan vulgar como él terminaba haciendo un dibujo tan elegante! Era un gran humorista y extraordinario analista político. Empezó como mi alumno y terminó siendo mi maestro.”
Este tributo fue una prolongación del realizado en la pasada FIL en el Zócalo (del 8 al 17 de octubre), la cual llegó a Iztapalapa, primera alcaldía de la Ciudad de México en tener una replica, misma que concluye mañana. El monero murió el 25 de junio; este 8 de noviembre hubiera cumplido 56 años.