Hoy es el Día Mundial de la Diabetes, que es el problema de salud más importante que tiene México, con más de 13.3 millones de personas con diagnóstico de la enfermedad. Entre 4 y 6 millones más están en la misma situación, pero no lo saben. Lo peor es que aunque el crecimiento del mal se aceleró a partir de la década de los 80 y desde 2016 está vigente una declaratoria de emergencia sanitaria, es muy poco lo que se ha logrado para revertir el impacto en la salud y vida de las personas, afirmó Carlos Aguilar, director de Nutrición del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (INCMNSZ).
La evidencia está en los hospitales adonde llegan los enfermos. La mayoría ingresa con niveles altos de glucosa y menos de la mitad se va de alta con valores óptimos, revela un reporte de la Secretaría de Salud (Ssa) sobre la situación de pacientes sin acceso a las instituciones de seguridad social.
Los afectados tampoco siguen las medidas de cuidado y prevención de las complicaciones de la diabetes, de acuerdo con el informe con datos al tercer trimestre de 2021 de los nosocomios que forman parte del Sistema de Vigilancia Hospitalaria de Diabetes Mellitus tipo 2.
Señala que sólo 13 por ciento de quienes han estado hospitalizados dijeron realizar alguna actividad física al menos 30 minutos diarios y 25 por ciento nunca se ha realizado un examen general de orina, principal vía para la detección y diagnóstico de insuficiencia renal.
Una medida que los individuos con diabetes deben llevar a cabo en cada consulta médica es la revisión de pies para identificar de manera temprana afectación en terminaciones nerviosas y deficiencias circulatorias, con la finalidad de evitar la amputación de extremidades. Pero a 44 por ciento nunca le han efectuado tal evaluación.
De los pacientes internados en alguno de los hospitales dependientes de la Ssa, 65 por ciento no han tenido una revisión oftalmológica, indispensable para encontrar a tiempo la retinopatía diabética causante de ceguera. Además, 63 por ciento no han acudido con algún nutriólogo para llevar una alimentación saludable.
La falta de información y lo complejo que resulta el cambio cultural de estilo de vida es parte del desafío que enfrenta el país, así como el riesgo en que se encuentran 72 por ciento de los adultos que viven con sobrepeso y obesidad, principal factor que predispone al desarrollo de la alteración metabólica.
En una condición similar están 37 por ciento de niños y adolescentes que también tienen exceso de peso corporal.
El año pasado, la diabetes ocasionó 151 mil muertes, 50 por ciento más que lo registrado en 2019, indican estadísticas oficiales.
La evidencia del rezago en este tema quedó en evidencia durante la pandemia de Covid-19, pues la diabetes ha sido una de las comorbilidades con un alto impacto en la severidad de la infección. De quienes han fallecido por complicaciones graves de coronavirus, 37 por ciento tenían diabetes, 45 por ciento vivían con hipertensión arterial y 22 por ciento con obesidad.
El especialista del INCMNSZ planteó que para revertir la carga de enfermedad y muerte por la alteración metabólica se requiere cumplir con tres objetivos. El primero es trabajar en la concientización de las personas sobre sus factores de riesgo y la importancia de modificar su estilo de vida.
En segundo lugar, elevar el diagnóstico. Comentó que hasta hace 10 años la mitad de los afectados desconocían que tenían su glucosa elevada. Actualmente, 33 por ciento está en esta situación. Es un avance, aunque mínimo si se compara con Europa, donde entre 6 y 10 por ciento de pacientes no saben que tienen diabetes.
El tercero es la prevención y el diagnóstico oportuno, los cuales son fundamentales para prevenir las complicaciones.