Bruselas. La asociación solidaria Los Amigos de Cuba en Bélgica ratificó ayer su rechazo al bloqueo económico, comercial y financiero estadunidense contra la isla, política que calificó de criminal.
El Consejo de Dirección de la organización precisó en un comunicado que el cerco recrudecido por la administración de Donald Trump con 243 medidas, todas mantenidas por su sucesor en la Casa Blanca, Joe Biden, impide el desarrollo del país caribeño en un periodo tan complejo de pandemia de Covid-19 y crisis económica.
En el texto, al que tuvo acceso Prensa Latina, reafirmó su solidaridad con el pueblo cubano y reconoció su firmeza y determinación en la construcción de una sociedad socialista, democrática, humanista y solidaria.
Los Amigos de Cuba en Bélgica saludaron la reactivación del turismo en la isla a partir del 15 de noviembre, y el regreso ese mismo día de los niños a las aulas. Asimismo, consideraron “espectacular” el avance en la isla de la campaña de vacunación contra el Covid-19, con inmunógenos desarrollados a partir de los logros científicos y biotecnológicos cubanos.
El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, agradeció la firme postura en defensa de la revolución del eurodiputado español Manuel Pineda, a quien recibió en esta capital.
El canciller expresó la gratitud por el activo apoyo del vicepresidente del Grupo de Amistad con Cuba de la Eurocámara, en denuncia de la actual campaña político-comunicacional liderada por el gobierno de Estados Unidos que atenta contra la estabilidad y la soberanía de la isla.
El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, cuestionó ayer la aureola mediática desplegada a escala internacional por la convocatoria de una marcha opositora en la isla el próximo lunes, justo cuando el país reabre sus fronteras al turismo. “Pero eso no nos quita el sueño: estamos preparados para enfrentar cualquier acción injerencista contra nuestro país”, afirmó el mandatario en un mensaje televisado.
En tanto, Estados Unidos instó ayer a La Habana a permitir que los cubanos se expresen libremente en la protesta callejera, y advirtió que podría aplicar más sanciones si se transgreden los derechos humanos de los manifestantes.
El director del Centro de Investigaciones de Política Internacional (CIPI), José Ramón Cabañas, denunció ayer la participación de Estados Unidos en la convocatoria a la marcha desestabilizadora en la isla.
Al comparecer en el programa radiotelevisivo Mesa Redonda, recordó que Samantha Power, administradora de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid), anunció la movilización una semana antes de ser convocada en Cuba.
Washington apoya al pueblo cubano en su deseo de manifestarse pacíficamente, y “estamos monitoreando activamente la situación en Cuba e interactuando con contactos claves antes de las protestas planeadas para el 15 de noviembre”, indicó a periodistas la subsecretaria adjunta para asuntos de las Américas, Emily Mendrala, en el Departamento de Estado.
El disidente cubano Guillermo Fariñas fue detenido ayer en Santa Clara, tres días antes de la manifestación. Su madre, Alicia Hernández, afirmó que su hijo, quien está bajo tratamiento de antibióticos, fue llevado en ambulancia al hospital Arnaldo Milian Castro, escoltado por dos patrullas.
Fariñas, de 59 años, Premio Sajarov a la Libertad de Pensamiento del Parlamento Europeo 2010, realizó 23 huelgas de hambre durante la década de 2000 para protestar contra el gobierno, lo que debilitó significativamente su salud.
