Los visitantes del Centro Histórico sumarán 3 millones durante el fin de semana, afirmó el director del sector 52 de la Policía Auxiliar de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, Eduardo Camacho, por lo que ante la alta asistencia los 300 efectivos asignados a la zona intensificaron la vigilancia.
Durante un recorrido por establecimientos comerciales del corredor peatonal Madero, el Jefe Orca, comentó que el jueves pasado hubo un millón de personas.
Estimó que al tratarse de la primera quincena de noviembre y de la permanencia del semáforo verde en la capital, el número de asistentes podría mantenerse en dicha cantidad todos estos días, hasta este domingo, con motivo de El Buen Fin.
De acuerdo con información del gobierno capitalino, en un día habitual Madero “es la calle más transitada de la ciudad y del país entero, pues por ella pasan más de 350 mil personas. Además, es una de las vías que más memorias posee, pues al ser una ruta directa hacia el Zócalo ha sido estratégica en diversos momentos de la historia”.
En entrevista, el mando señaló que los ciudadanos pueden acudir con confianza a realizar sus compras o comer en los establecimientos de la zona, porque además de la Policía Auxiliar también han sido comisionados integrantes de la Policía Metropolitana, independientemente de la presencia de personal del gobierno capitalino y supervisores de las cámaras de videovigilancia.
Indicó que el robo que cometen los delincuentes, identificados como farderos, son los que de mayor frecuencia, particularmente en tiendas de ropa; no obstante, mencionó que hasta el jueves sólo habían sido detenidos un hombre y una mujer.
En la zona se aplica el código águila, que consiste en visitar cada negocio del Centro en múltiples ocasiones durante el día a fin de mantener la presencia policiaca e inhibir los delitos, como en el caso de los centros joyeros, donde no se han presentado incidencias.
Comentó que a diferencia de los farderos de Madero, 16 de Septiembre, 5 de Mayo y 20 de Noviembre, en Anillo de Circunvalación el mayor problema son los carteristas o cadeneros, por lo que los rondines se realizan con mayor frecuencia en bicicleta, motocicleta y patrullas.
Comerciantes y visitantes dijeron que con la presencia policiaca la percepción de seguridad se incrementa; sin embargo, Felipe Vázquez, quien compró ropa en un local de Madero, comentó que la vigilancia debe ser mayor en las estaciones del Metro.
Residente de la alcaldía Gustavo A. Madero, dijo que hace una semana en la estación Allende, al abordar el convoy, una mujer se le acercó demasiado con el pretexto de que el vagón iba saturado, pero ahora sabe que mientras trataba de evadirla ante la insistencia, “sólo fue el distractor, porque su cómplice me sacó el celular y la cartera. Ni hablar, es una lección aprendida”.