Asís. El papa llamó este viernes a "devolver la palabra" a los más necesitados, durante una breve visita a la ciudad de San Francisco de Asís (centro de Italia) con ocasión de la jornada mundial de los pobres.
Al llegar por la mañana, el pontífice argentino, que apoya una "Iglesia pobre para los pobres", fue acogido por las autoridades locales y por más de 500 personas precarias procedentes de diferentes países de Europa, entre ellos Polonia, Croacia, España y unos 200 franceses.
Bajo cantos y aplausos, el Papa, de 84 años, recibió simbólicamente el bastón del peregrino antes de entrar en la basílica de Santa María de los Ángeles.
Ante la pequeña capilla donde murió Francisco de Asís en 1226, seis personas, entre ellas dos afganos, le dieron testimonio de su difícil recorrido, a veces muy conmovidos.
"Es hora de que se devuelva la palabra a los pobres, porque durante demasiado tiempo sus peticiones no fueron escuchadas. Es hora de abrir los ojos a la desigualdad en la que viven tantas familias. Es hora de arremangarse para restablecer la dignidad mediante la creación de puestos de trabajo", instó el Papa.
Criticando "la injusticia de ciertas medidas económicas" y la "hipocresía de quienes quieren enriquecerse de manera desmesurada", el sumo pontífice llamó a un "examen de conciencia".
Antes de volver al Vaticano a mitad del día, también invitó a "indignarse ante la realidad de los niños hambrientos, reducidos a la esclavitud", y pidió que "cesen las violencias contra las mujeres, para que éstas sean respetadas y no tratadas como mercancía".
Para Louis Royer, de 54 años, de los cuales 25 los vivió "en la calle", esta jornada "simbólica" representa "un gran signo de esperanza".
"Hoy, todos somos iguales, no hay grandes ni pequeños. Espero que esto impulse a algunos a salir adelante", confió a la Afp.
Es la quinta visita del Papa a Asís desde su elección en 2013. La última data de octubre de 2020, para la firma de su encíclica Fratelli tutti.