Las clases media y alta se achican en México, mientras la clase baja se agranda, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Los hogares de clase media en México (con un ingreso diario de entre 10 y 20 dólares) retrocedieron 4.5 puntos porcentuales, del 46.7 por ciento en el 2018 a 42.2 por ciento en 2020, año en que la economía mexicana se vio afectada por la crisis de la pandemia de Covid-19.
El organismo autónomo, que actualizó el ejercicio que cuantifica la clase media en México, basado en patrones de gasto de la Encuesta Nacional de Ingreso y Gasto de los Hogares (Enigh), para el periodo 2010-2020, reveló también que el peso de los hogares con rentas altas cayó de 2.2 por ciento en 2018 a 1.2 por ciento del total en el 2020.
Asimismo, la clase más pobre pasó de 51.1 a 56.6 por ciento de 2018 a 2020, respectivamente.
En 2010 se contabilizaron 29 millones de hogares y 112.3 millones de personas, de ellos, 42.4 por ciento de los hogares y 39.2 por ciento de las personas pertenecían a la clase media. Eran cerca de 12.3 millones de hogares situados en niveles de renta intermedia. Pero, ocho años después, en el 2018, la clase media pasó a estar formada por 46.7 por ciento (16.2 millones de familias).
Tras el golpe atestado por la crisis de la pandemia, en 2020, esta clase media pasó a estar formada por 42.2 por ciento, con cerca de 15.1 millones de hogares. Según el padrón, en 2020 había 126.8 millones de personas y 35.7 millones de hogares.
De acuerdo con el reporte del Inegi, la clase alta pasó de 724 mil 689 hogares en 2010, a 429 mil 701 familias una década después.
La clase baja, con ingresos promedio mensuales de 11 mil pesos, sumaba 15.9 millones de hogares en 2010 y para 2018 ascendió a 17.7 millones de hogares; para 2020, repuntó a 20.2 millones.
Así, cerca de un millón de personas pasaron de la clase media a la baja.
Sueño generacional
La clase media solía ser una aspiración. Durante muchas generaciones, pertenecer a la clase media suponía vivir en una casa confortable y tener un buen nivel de vida gracias a un trabajo estable y una carrera con oportunidades laborales, de acuerdo a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Por entidad federativa, la Ciudad de México es la primera de la lista con 58.9 por ciento de clase media, seguido por Colima, con 54.6 por ciento; Jalisco, 53.6 por ciento; Baja California, Sonora y Baja California Sur, con 53.1, 51.9 y 51.1 por ciento, respectivamente.
Chiapas, con 19.5 por ciento de clase media, está muy alejado del promedio del país de 42.2 por ciento.
En cuanto a la clase alta, la Ciudad de México alberga 3.1 por ciento; Nuevo León, Colima, Querétaro, Yucatán, en promedio 2 por ciento. Mientras Guerrero, Tlaxcala e Hidalgo tienen 0.2 por ciento cada uno.
En el extremo, Chiapas reporta 80.2 por ciento de la clase baja; Guerrero, Oaxaca, Puebla y Tlaxcala, le siguen con 75.8, 73.9, 68 y 66.2 por ciento, en ese orden.
Lo anterior demuestra que la clase media predomina en zonas urbanas y que su mayor gasto lo destina a la educación y tarjetas de crédito.