Aunque la economía observa una recuperación después de la pandemia de Covid-19, las compras de El Buen Fin 2021 estarán marcadas por la cautela derivada de un mayor nivel inflacionario, el cual ha sido consecuencia de las interrupciones de las cadenas de suministro, señalaron expertos.
Humberto Calzada, analista de Rankia, señaló que después de un año complicado por la contingencia sanitaria, la economía ha mostrado una recuperación, por lo que para la edición del programa de reactivación de este año se espera un buen comportamiento en las ventas.
Sin embargo, apuntó, que El Buen Fin 2021 se realiza en un contexto donde el nivel inflacionario es alto, lo cual tendrá impacto en los precios finales de todos los productos que se pueden ofrecer.
Consideró que la inflación –que llegó ayer a 6.24 por ciento anual– será un factor para que el consumidor compre con cautela, pues la prioridad será adquirir bienes de primera necesidad, más que compras de lujo como ha sucedido en otros años.
Ignacio Martínez Cortés, coordinador del Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios (Lacen) de la UNAM consideró que en esta ocasión se debe “consumir con mucha cautela y si se puede ahorrar, aún mejor, porque 2022 va a ser un año en el que estaremos creciendo a niveles prepandemia”.
“Ya no vamos a tener este espejismo de crecimiento de 6 por ciento, sino que puede ser de 2.5 por ciento”, dijo.
Pronosticó que al cierre de 2021 y en el primer trimestre de 2022 habrá “estanflación en puerta: un aumento de la inflación y decrecimiento de la riqueza”.
Apuntó que cada consumidor debe considerar su situación laboral a la hora de adquirir, pues el índice de confianza de consumidor de octubre se contrajo 0.2 por ciento, porque se redujo la intención de compra de bienes duraderos y el mercado intenta revertir esta tendencia.
Los cuellos de botella causados por interrupciones de suministros, como la crisis de los contenedores, la escasez de semiconductores para automóviles y otros aparatos electrodomésticos o electrónicos como pantallas y videojuegos, computadoras, afectarán los precios. El productor va a trasladar los costos al consumidor y este último verá hasta dónde está dispuesto a pagar esta alza.
Martínez Cortés comentó que los consumidores deben tener en cuenta que las ofertas no estarán en los productos de alta gama y deberán cuidar de no comprar tecnología con mucho rezago, pues la empresas buscarían sacar sus inventarios.
Facilidades
Martínez Cortés mencionó que es preciso reflexionar sobre las compras a meses sin intereses, pues el nivel de inflación de octubre puede llevar a que la junta de gobierno del Banco de México decida elevar la tasa de referencia 0.50 puntos, lo cual encarecerá el dinero y afectará a quienes no puedan ni pagar el mínimo.