El linchamiento de un asaltante en la colonia Venustiano Carranza la noche del domingo pasado fue calificado por algunos habitantes del lugar de “un acto de justicia ante la incapacidad de la autoridad de hacer su chamba, porque estamos hasta la madre de que estas ratas siempre se salgan con la suya, pero ahora hubo unos valientes que les pusieron un hasta aquí”.
El afectado del robo a casa habitación por el hombre asesinado a golpes y otros dos que huyeron rechazó hacer declaraciones. Su abogada informó que “fue a levantar su denuncia por lo que hace al robo. No tiene nada que ver con lo sucedido afuera porque ni siquiera lo vio, estaba con su familia en su casa”.
A menos de 48 horas, la gente continúa con sus actividades normales, aunque “con el miedo de siempre por la inseguridad que aquí se vive y la falta de policías, por lo que la mayoría nos guardamos temprano”, señalaron vecinos.
Los policías “se aparecieron, eso sí, el domingo, pero después de que pasó todo dizque para investigar” en el cruce de la calle Horticultura y la calzada del Peñón, demarcación Venustiano Carranza, donde quedó el cuerpo del hombre de entre 20 y 25 años.
Los elementos del sector Consulado de la Secretaría de Seguridad Ciudadana acudieron a dicho punto a las 22:30 horas ante el llamado del Centro de Control y Comando C2 Norte, por una denuncia de robo a casa habitación.
El afectado informó que minutos antes tocaron a su puerta y al abrir ingresaron por la fuerza a su domicilio tres hombres, quienes lo amagaron y amarraron a su esposa e hijas para llevarse alrededor de 100 mil pesos en efectivo y 15 mil pesos en joyas.
De acuerdo con el informe policial, una de las adolescentes escapó y a gritos solicitó ayuda a los vecinos, quienes atraparon a uno de los delincuentes, al que le quitaron un arma de fuego tipo revólver, que resultó ser una réplica.
Los golpes que le propinaron lo dejaron inconsciente sobre la cinta asfáltica, donde los paramédicos que llegaron determinaron muerte por golpes, por lo que se inició una carpeta de investigación por el delito de homicidio.
A varios metros de distancia del lugar, en la calle Herreros, se ubica una cámara de videovigilancia pública que “muy difícilmente pudo haber grabado lo sucedido, eso si no está descompuesta, que es lo más seguro”, señalaron entrevistados, quienes rechazaron dar su nombre y “llamaron a las autoridades a hacer su trabajo y evitar que algo así vuelva a suceder”.