México experimentó el exceso de mortalidad más alto de los países que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), derivado de la pandemia de coronavirus. Durante el año pasado y la primera mitad del actual, la mortalidad por todas las causas aumentó 54.8 por ciento respecto al promedio de 2015 a 2019, detalló la organización.
Hasta el 1º de noviembre, se habían registrado en México más de 38 millones de infecciones por Covid-19 y casi 290 mil muertes por el virus, pero el país registra la tasa de exceso de mortalidad más alta de la OCDE, con 4 mil 456 decesos por millón de habitantes, mientras el promedio de la organización es de mil 499.
“El exceso de mortalidad fue mucho más alto que las muertes por Covid-19 reportadas en México y Polonia, lo que podría indicar un subregistro de algunas muertes por SARS-CoV-2 y/o decesos adicionales debido a otros factores, incluidas las consecuencias indirectas del virus”, consignó en el reporte “Una mirada a la salud”.
Agregó que México es el país donde los trabajadores de la salud se han visto más afectados”, ya que hasta septiembre 278 mil se habían infectado y 4 mil 400 fallecido por el virus. Es decir que alrededor de 8 por ciento de los casos de Covid-19 y cerca de 2 por ciento de todas las muertes se han producido en este grupo.
La crisis por otro lado implicó que el gasto en salud como porcentaje del producto interno bruto (PIB) “aumentara drásticamente”, de 5.4 por ciento previo a la pandemia a 6.2 en 2020, pero aun con ello “el sistema de salud en México no cuenta con recursos suficientes”, no sólo en cuanto a personal, pues también derivado de la pandemia hubo una disminución en consultas médicas por persona, abundó.
También se cuenta con la menor cantidad de camas de hospital, una por cada mil habitantes, frente al promedio de 4.4 en la OCDE y a las 12.8 de Japón, el país con mayor cobertura. Dicha tendencia coincide con la esperanza de vida; en los extremos se encuentran de nuevo México y Japón, con 75.1 años y 84.4, respectivamente, mientras el promedio de la organización es de 81.
El informe recalca que las tasas de obesidad continúan aumentando en la mayoría de los países de la OCDE, con un promedio de 60 por ciento de los adultos con esa condición, pero en México alcanza a 75.2 por ciento, por arriba de Chile y Estados Unidos. Mientras la prevalencia de diabetes también es la más alta en el país latinoamericano, con 13.5 por ciento de adultos con la enfermedad, prácticamente el doble del 6.7 por ciento promedio de la organización.