Los países reunidos en la cumbre de cambio climático deben precisar lo que están haciendo hoy para atacar este problema global, más que hablar de promesas para la mitad de siglo basadas en mercados de carbono y la geoingeniería, con las cuales no se limita el aumento de la temperatura por debajo de 1.5 grados Celsius, señalaron Grupo ETC, Amigos de la Tierra Estados Unidos, Justicia Ambiental de Mozambique y otras 23 organizaciones.
En un pronunciamiento señalaron que la única manera de evitar la catástrofe climática es hacer transformaciones profundas, sistémicas y justas de nuestros sistemas energéticos, alimentarios, de transporte e industriales. “Los objetivos del cero neto de emisiones son utilizados para encubrir el business-as-usual”.
Advirtieron que el llegar al cero neto de emisiones se basa en la idea de anular las emisiones en la atmósfera, en lugar de eliminar sus causas. Se requiere, agregaron, disminuir “el consumo excesivo de las élites del Norte y del Sur, al mismo tiempo que se incrementa la inversión en fuentes de energía renovables verdaderamente justas y limpias, en sistemas alimentarios sostenibles basados en la comunidad, así como en medios de subsistencia”.
Añadieron que “no nos faltan las soluciones necesarias y reales, sino la voluntad política de aplicarlas”. Los objetivos del cero neto “disfrazan la inacción climática y desvían la atención de la necesaria y urgente labor de eliminación de los combustibles fósiles desde su origen y de localización de sistemas y economías alimentarias sostenibles”.
Agregaron que esto se basa en “la suposición de que las compensaciones de carbono, las plantaciones de árboles, la bioenergía y las distracciones peligrosas como el hidrógeno y la captura y almacenamiento de carbono mantendrán o eliminarán de alguna manera las emisiones del aire después de que los contaminadores hayan hecho su daño”.
Sumado a ello, hay tecnologías no probadas que no se han hecho realidad y que siguen siendo inviables a la escala necesaria, son imaginadas como supuestas soluciones para emisiones continuas. Entre ellas están la captura y el almacenamiento de carbono hasta la captura directa en el aire y la quema de residuos plásticos como combustible.
Todo esto “refuerza y profundiza la economía fósil responsable de la crisis climática, y al mismo tiempo, imponen nuevos riesgos profundos a las comunidades de primera línea de todo el mundo”. Además las comunidades y “el Sur Global no generaron la crisis climática, pero son las que enfrentan sus peores impactos”.