El Instituto Nacional de Migración (INM) anunció que “mantiene la ayuda humanitaria a personas migrantes de diferentes nacionalidades” que salieron en caravana el pasado 23 de octubre de Tapachula, Chiapas, con destino a la Ciudad de México.
En un comunicado, el organismo señaló que, a solicitud de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y de los propios migrantes, integrantes de los llamados Grupos Beta “se mantienen pendientes para seguir brindando atención médica, asesoría y auxilio”.
De igual forma, el INM reiteró su compromiso para que, “bajo la supervisión de la CNDH, se proporcionen tarjetas de visitante por razones humanitarias a mujeres embarazadas y sus familias, a menores de edad y sus acompañantes, a personas enfermas y con discapacidad y quienes les asisten, así como a las personas migrantes que tienen solicitud positiva de refugio y sus familiares”.
También recordó que a dichos grupos les ofrece el traslado a diferentes entidades del país para realizar estos trámites, así como alojamiento en albergues de puertas abiertas y alimentación.
Dan atención a urgencias médicas
Durante la última semana, recordó el INM, los integrantes de los Grupos Beta y agentes federales de migración “han atendido diversas urgencias médicas y de salud registradas entre integrantes de la caravana”.
A manera de ejemplo, señaló que, por petición de la CNDH, “se auxilió a una mujer haitiana con ocho meses de embarazo y dolor en el vientre; fue llevada al hospital de Mapastepec, Chiapas, pero uno de los autodenominados líderes de la caravana habló con su esposo y los convenció de dejar el nosocomio para seguir en la caminata”.
También por solicitud de la CNDH, “se dio asistencia médica a una familia originaria de El Salvador que manifestaba diferentes malestares físicos tras varias horas de caminata sin agua y alimento, bajo temperaturas mayores a 35 grados centígrados.
“Asimismo, en Mapastepec, autoridades de Salud detectaron seis casos de dengue entre las personas extranjeras; cinco de ellos menores de edad, uno con cuadro grave. Los padres de éstos declinaron el apoyo médico tras la intervención de los líderes de la caravana.”