Las obras Maso Ye’eme, de Nubia Melina Jaime Sanjuan (Hermosillo, 1984), y Nocturno del Pacífico, de Juan Pablo Ontiveros Vázquez (Morelia, 1993), son las ganadoras del Concurso de Composición Arturo Márquez para Orquesta de Cámara 2021. Cada uno recibirá 100 mil pesos de premio.
Hubo menciones honoríficas para La danza de los Matlachiquetzapascolaconcheros, de Fernando Macías Sánchez (Aguascalientes, 1988), y Alebrijes de papel, de Carlos Lavín Martínez Pérez Galván (Ciudad de México, 1987). Las cuatro obras serán interpretadas por la Orquesta Mexicana de las Artes, conducida por David Pérez Olmedo, en el concierto de premiación el 2 de diciembre, en el Centro Cultural Roberto Cantoral. Las piezas tienen una duración de 10 a 20 minutos.
El concurso sólo premió dos obras, en vez de tres, como se estipula en la convocatoria, debido a que, según el compositor Arturo Márquez, “eso es lo que acordamos con el jurado: dos obras ganadoras y dos menciones. El recurso (restante) seguramente vamos a disponer de él para hacer unos certámenes para jóvenes compositores en 2022”. Aparte de Márquez, el jurado estuvo integrado por el director Ricardo Sierra Moncayo y la compositora María Granillo.
El certamen cuenta con el apoyo del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal) y el Patronato del Centro Cultural Roberto Cantoral, que cubren el monto de los reconocimiento económicos por partes iguales.
Este concurso para compositores mexicanos menores de 40 años tiene la particularidad de que las piezas participantes incorporan algún ritmo del acervo tradicional o popular arraigados en México.
Para su edición 2021, el concurso recibió 66 propuestas, aunque en años anteriores se han enviado mayor número, apuntó en entrevista el autor de Danzón No. 2. Respecto de la gama de intereses musicales de los concursantes, el compositor se percató del empleo del son huasteco veracruzano, la canción cardenche y los ritmos afrocubanos.
La obra Maso Ye’eme, de Jaime Sanjuan, por ejemplo, reúne danzón con música yaqui, “dos culturas bastante lejanas; sin embargo, la joven compositora hizo una fusión bastante aceptable entre los dos mundos”.
Nocturno del Pacífico, de Ontiveros Vázquez, tiene que ver con las fiestas mexicanas y la música de banda, mientras la obra de Macías Sánchez se relaciona con la música indígena. Alebrijes de papel es una conjunción entre varios géneros.
–¿Qué dicen los resultados del concurso de lo que pasa actualmente en la composición en México?
–El concurso sirve para apoyar a los jóvenes y, sobre todo, para resaltar que la música tradicional es viable de fusionar con la de concierto.