El Departamento de Estado de Estados Unidos anunció una recompensa hasta de cinco millones de dólares por información que lleve a detener a cuatro integrantes del cártel de Sinaloa, entre ellos, Aureliano Guzmán Loera, hermano de Joaquín El Chapo Guzmán Loera.
Ese país acusó a Aureliano Guzmán, El Guano, y a los hermanos Ruperto, José y Heriberto Salgueiro Nevárez de ser responsables “de más de 63 por ciento de las 96 mil 779 muertes por sobredosis de drogas en Estados Unidos entre marzo de 2020 y 2021.
De acuerdo con registros de las autoridades mexicanas, José fue detenido por efectivos del Ejército en el municipio de Hidalgo del Parral, Chihuahua, en octubre de 2012; Heriberto, aprehendido el 5 de febrero de 2015 en Culiacán, Sinaloa, y solamente Ruperto se encuentra en libertad.
Otro integrante de esa familia, detenido en octubre de 2011, es Joel Salgueiro Nevárez, en Culiacán, Sinaloa, pero en diciembre de 2019 fue extraditado a Estados Unidos. No obstante, el Departamento de Estado, señala que los cuatro imputados “operan bajo el paraguas de la federación del cártel de Sinaloa”.
Aureliano Guzmán Loera y los hermanos Salgueiro Nevárez están acusados de “violar las leyes de drogas de Estados Unidos, que incluyen conspiraciones internacionales para distribuir mariguana, cocaína, metanfetamina y fentanilo. “Una de las acusaciones incluye el tráfico de fentanilo, que es responsable de más de 63 por ciento de las 96 mil 779 muertes por sobredosis de drogas en Estados Unidos entre marzo de 2020 y 2021”.
En el caso de Aureliano Guzmán Loera, intentó apoderarse del liderazgo del cártel de Sinaloa tras la captura de su hermano Joaquín, en enero de 2016, y desató una lucha contra los hijos de El Chapo, así como de Ismael El Mayo Zambada García.
Entre 2016 y 2018, Iván y Alfredo Guzmán sostuvieron confrontaciones directas con su tío Aureliano por el control de Badiraguato, lo que provocó que la madre de El Chapo tuviera que abandonar su casa y trasladarse a Culiacán.
En tanto, los hermanos Salgueiro Nevárez son los fundadores de una célula delictiva que opera en Sonora, Sinaloa y Chihuahua, conocida como Gente Nueva. El grupo fue relacionado con la masacre de nueve integrantes de las familias LeBaron y Langford, en noviembre de 2019, en el municipio de Bavispe, Sonora.
La organización mantiene una estructura en la cual hay jefes regionales, y aunque actúan de manera conjunta para enfrentar a sus enemigos, el territorio sinaloense está dividido, de manera que a decir de las autoridades consultadas, la capital está controlada por los hijos de Guzmán Loera.
Aureliano tiene dominio en parte de Badiraguato y La Tuna, aunque en la zona existen células de El Chapo Isidro y algunos grupos que colaboraban con la organización de los hermanos Beltrán Leyva que se han sumado al cártel Jalisco Nueva Generación, señalaron los funcionarios mexicanos.