El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) logró el máximo histórico de 20 millones 767 mil trabajadores inscritos, ya que se recuperaron los empleos perdidos durante la pandemia provocada por el Covid-19, además de que se trata de empleos permanentes y bien remunerados, anunció en el Senado, el director de ese Instituto, Zoé Robledo Aburto.
Ello representó para el IMSS mil millones de pesos adicionales a la meta propuesta para este año de mil millones de pesos, y en bien parte es resultado de la reforma legislativa para frenar “la
a subcontratación y el outsourcing abusivo”, toda vez que 2.9 millones de trabajadores migraron a una empresa real, y el 75 por ciento de ellos vieron incrementados sus salarios en 11 por ciento.
Es decir, del subregistro salarial en que los tenían los patrones, al ubicarlos en empresas subcontratistas, se los contrató con el salario real y prestaciones, lo que representa un beneficio para los trabajadores en materia de aseguramiento, incapacidades y pensiones, agregó al comparecer, conjuntamente con el director del ISSSTE, ante la Comisión de Salud, del Senado de la República.
Robledo Aburto destacó que el IMSS “es más que la pandemia”, ya que además de atender la emergencia provocada por el Covid-19, actualmente se encuentra en un intenso proceso de recuperación de sus servicios. Aseguró asimismo se atiende de forma permanente el problema de los niños con cáncer, con un programa integral y se avanza para resolver el abasto de medicamentos en todo el país.
Resaltó que no hay desabasto generalizado de medicinas, aunque reconoció que el problema no está resuelto. Explicó´, en ese sentido, que en la compra sectorial de fármacos, donde participaron ISSSTE, IMSS, SEDENA, Marina e Institutos Nacionales de Salud, más la compra que logró la UNOPS, se tuvo un resultado global de mil 186 claves de medicamentos que representan un volumen de mil 514 millones de piezas para todo el sector.
Además, dijo, el IMSS desarrolló dos estrategias para los medicamentos de difícil acceso: verificaciones físicas periódicas de los inventarios en farmacias y almacenes, que ha permitido en 2021 realizar siete mil traspasos de 4.3 millones de piezas de una a otra Oficina de Representación del Seguro Social en los estados, así como sustituciones terapéuticas para utilizar un mejor medicamento, con mayor disponibilidad.
Hubo, detalló, demoras en los tiempos de entrega, intermitencias que se buscan resolver de manera cotidiana. Se ha dejado de utilizar, detalló, el indicador del abasto, porque el abasto puede significar que se tienen en el almacén, en tránsito o en farmacia una cantidad de medicamentos. Nosotros utilizamos un mejor indicador, que es el de las recetas surtidas completamente, ahí es donde se ve la realidad de la institución.
“Con ese indicador, puedo decir que han existido problemas en diferentes claves, en diferentes momentos, e incluso, en diferentes estados o particularmente en diferentes unidades en específico, pero eso no significa un desabasto generalizado, ni hace cierta la aseveración que no hay medicamentos en ningún lado del país”.
El director del IMSS resaltó que ahora ese Instituto trabaja en atender padecimientos diferentes a COVID-19, a través de la Estrategia Nacional de Recuperación de Servicios Ordinarios. Se prevé que a finales del año se realizarán 80 millones de consultas de medicina familiar, 13 millones de consultas de especialidad, 983 mil cirugías, 5.3 millones detecciones de diabetes mellitus y 14.5 millones de hipertensión arterial.
En cuanto a la atención a la pandemia de COVID-19, Robledo Aburto resaltó que hubo un trabajo en equipo y coordinado con todos los servidores públicos de las dependencias de los Gobiernos federal y estatales para privilegiar los servicios médicos a la población.
Resaltó que para mover al IMSS en 100 días se retomó la estrategia de Unidades Médicas de Tiempo Completo, la atención las 24 horas y los fines de semana en algunos casos; se optimizaron espacios de consulta externa, se reactivó el módulo de recuperación de citas y se realizaron 10 intensas jornadas quirúrgicas en Zacatecas, Chihuahua y Tabasco.
Se implementaron, detalló, 3 mil 223 Módulos de Atención Respiratoria del Seguro Social (MARSS) para la detección, tratamiento oportuno y seguimiento de los pacientes ambulatorios con COVID-19.
“Todo este esfuerzo significó la contratación de 47 mil 185 trabajadores y trabajadoras eventuales”, dijo, y esa suma de esfuerzos permitieron destinar 20 mil de las 34 mil camas censables con las que cuenta el IMSS para atención exclusiva de pacientes con esta enfermedad.
“No le cerramos la puerta a nadie y estuvieron hospitalizados en alguna de estas camas 347 mil mexicanas y mexicanos, 33 mil de estas hospitalizaciones fueron de personas sin seguridad social. El IMSS fue más que la pandemia”, insistió.