“Llamo a todos, a los que están en contra de nosotros, a que voten en contra porque de esa manera se ejerce un derecho de manera pacífica”, dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador al pedir de nueva cuenta a los ciudadanos participar en la consulta de revocación de mandato programada para marzo del año próximo.
Reprochó que desde que era opositor, cuando sus adversarios veían que iba con ventaja, la estrategia era llamar a no acudir a las urnas.
Sin embargo, ponderó la importancia de la consulta del año entrante para mostrar si cuenta o no con el apoyo del pueblo, que en su opinión es la única forma de gobernar; de lo contrario, dijo, su presencia en Palacio Nacional quedaría reducida a ser un adorno, un florero.
En la conferencia de prensa matutina señaló que ya revisó la normatividad en torno a la consulta y sí puede hablar de ello, “nada más sin pedir que voten por mí, eso sí estaría mal y no es esa mi intención”.
Yo lo que quiero - añadió-es que la gente participe, que los ciudadanos tengamos siempre un papel protagónico en la vida pública.
Entonces hizo el llamado a que voten, aún en su contra.
Recalcó que no hay otro mejor sistema que el democrático para enfrentar controversias, para decidir en conflictos, lo mejor es acudir al pueblo, al soberano, al que manda.
El pueblo pone, el pueblo quita, es totalmente antidemocrático decir ‘no voy a participar’.
Recordó que cuando era opositor los radicales llamaban a no votar y con ello, dijo, le hicieron siempre el juego a la derecha, y arrasaba el PRI.
“Esto lo hacían organizaciones sociales pero también organizaciones de la llamada sociedad civil; cuando veían que nosotros teníamos posibilidades nosotros llamaban a no votar. Hasta la última elección, de 2018.
“Supuestamente eran medidas radicales pero en realidad lo que se hacía era mantener el régimen de corrupción”, advirtió.
Ahora, señaló, el bloque conservador en lugar de llamar a la participación de la gente está a punto de advertir que la consulta es una farsa.
“Todavía no se descaran por completo pero no tardan, van a salir a decir de que es una farsa , que cuesta mucho dinero, que es innecesario (aun) cuando ya está en la Constitución”.
Son demócratas cuando les conviene, sostuvo, cuando gana un movimiento contrario a su pensamiento conservador para ellos no es democracia.
Luego reiteró que aún cuando no vote el 40 por ciento del padrón (requisito para que el resultado de la votación sea una resolución legal) si la mayoría de quien acuda a las urnas se pronuncia en su contra, se iría de la Presidencia.
“Ojalá y todos participemos porque para que sea vinculante tiene que votar el 40 por ciento de los ciudadanos empadronados, alrededor de 38 millones de ciudadanos.
Si todos cumplimos con nuestra responsabilidad y estamos a favor de la democracia, si somos sinceramente demócratas, se puede superar ese porcentaje.
“También decirles a los adversarios que si no se llega al 40 por ciento y yo pierdo y la gente dice mayoritariamente, son más los que quieren que yo me vaya, me voy, aún no cumpliendo 40 por ciento porque cómo voy a gobernar sin el apoyo de la gente, cómo enfrento a la mafia del poder sin el pueblo”.
Dijo que tiene muy en claro la enseñanza de la historia, la canallada que le hicieron al Presidente Madero, que se quedó solo, no logró un acuerdo con los campesinos porque no entendió la importancia que tiene la tierra para los campesinos y los adversarios se esmeraron en separarlo de Zapata y de otros dirigentes, dijo.