La muerte de Mario Lavista, uno de los músicos y compositores más importantes de México, conmocionó a la comunidad artística. Directores de orquesta y músicos cercanos al Premio Nacional de Ciencias y Artes 1991 lo recuerdan como un generoso exponente de la música contemporánea que se convirtió en maestro de maestros, tanto de compositores como de grandes músicos y tuvo un papel fundamental en la historia de la música de los siglos XX y XXI.

Personalidades del mundo de la música y la cultura compartieron con La Jornada una reflexión sobre el legado de Mario Lavista.

Arón Bitrán, violinista e integrante del Cuarteto Latinoamericano: “Es una pérdida terrible la muerte de Mario Lavista; es un amigo muy cercano de la familia y hay una relación profesional con él desde 1984, cuando escribió para nosotros su Cuarteto número 2, Reflejos de la noche, luego compuso otros cuartetos, muchos de los cuales tuvimos el gusto de trabajar cerca de él.

“Lo vamos a extrañar mucho, pero nos deja su obra, que nos acompañará siempre. Tampoco hay que olvidar que fue maestro de varias generaciones de compositores y gran promotor de la música en la revista Pauta; jugó un papel fundamental en la historia de la música de los siglos XX y XXI. Nos deja una música muy personal, poética y original.”

José Luis Castillo, director de orquesta y compositor: “La muerte de Mario Lavista es una gran pérdida para las ideas musicales y para la música en México y en el mundo. Fue un hombre cercano a todos nosotros, especialmente en Cepromusic. Fue ideólogo e impulsor de muchos proyectos; era un ser excepcional, con un compromiso con el arte y con las ideas musicales. Con él desaparece una manera de entender la música en México; espero que sus enseñanzas permanezcan en cada uno de nosotros”.

Enrique Barrios, director de orquesta: “En nombre propio y de las y los integrantes de la Orquesta Sinfónica del Instituto Politécnico Nacional, lamentamos mucho la pérdida temprana del maestro Lavista. Habríamos querido que llegara a los 100 años y que hubiese seguido con esa fantástica labor en tres aspectos, primero, como compositor que nos deja un legado importantísimo; la segunda como investigador de la aplicación de nuevas técnicas instrumentales, y tercero como maestro, ya que fue profesor de muchas generaciones; en mi caso fui su alumno de análisis. Lamentamos la pérdida de este gran músico mexicano”.

Carlos Miguel Prieto, director de orquesta. “Es una gran pérdida la muerte del maestro Mario Lavista, porque se extingue una voz que define una época. Viene de una tradición que lo conecta con Carlos Chávez a través de su otro maestro, Rodolfo Halffter. Ahí había una línea directa entre la generación de compositores e intérpretes de hoy. Casi todos los compositores estudiaron análisis o composición con Mario; tenía un conocimiento increíble de todo tipo de repertorio, incluso del de su tío Raúl Lavista. Era un intelectual de la música y su obra no era para nada fácil de comprender ni de interpretar. Era enormemente generoso y preocupado por los demás”.

Theo Hernández, especialista en música y amigo de Mario Lavista: “Podemos poner a Mario Lavista como uno de los músicos más importantes de la segunda mitad del siglo XX en México. Estuvo en el taller de Carlos Chávez y él fue quien lo convirtió en un músico completo. Su otra gran influencia fue su tío Raúl Lavista, a quien admiraba por su enorme colección de discos de música de concierto y por su prolífico trabajo de compositor para cine. Esa idea de tener un taller y ser maestro lo llevó también a ser un gran docente; podemos ver entre sus alumnos a varios de los más destacados compositores mexicanos que hay ahora.

“Otra de sus vertientes fue la de divulgador musical y, de la mano de ésta, editor. Allí está la revista Pauta, publicación plural que se vincula mucho con la literatura y las otras artes. Como persona era sumamente generoso, amable, alegre y con buen sentido del humor. México pierde a uno de sus más grandes hombres, indudablemente; pierde a un gran compositor y a un hombre de cultura, a un incomparable y generoso maestro que dio muchísimo al país.”

Javier Platas Jaramillo, violonchelista: “Mario Lavista es una de las figuras más señeras de la cultura nacional, que se convirtió en maestro de maestros, tanto de compositores como de grandes músicos. Fue generoso como pocos; su música nos remite a ecos de un pasado inexorable. La razón de su existencia era la razón de un arte musical superior de nuestra sociedad. Lamento profundamente su partida, creo, prematura, de este gran genio”.

Héctor Infanzón, pianista y compositor: “Lamento la partida de un enorme artista, pilar de la música mexicana y del mundo de la segunda mitad del siglo XX hasta nuestros días. Un gran artista, muy inteligente y muy generoso”.

María Pía Lara, filósofa y amiga del compositor: “Se ha ido un grande. Su camino fue crear una música tan eterna como son las oraciones y los rituales religiosos que de ella emanaban. Su muerte prematura nos llena de tristeza a todos los que lo conocimos y vimos sonreír. Fue un gran amante de la danza que su hija ha sabido encarnar perfectamente con su grupo Delfos”.

El pintor y escultor Arnaldo Coen conoció a Mario Lavista por medio de su tío Raúl Lavista en los años 50 del siglo pasado. Realizaron muchos proyectos juntos, otros se quedaron en el tintero. El primero se llamó Cluster, juego en el que tocaban todas las teclas del piano. Coen destaca, sobre todo, el homenaje que “le hicimos a John Cage con el proyecto que yo tenía basado en el i ching, que surgió desde 1974 cuando, en vez de una presentación escrita para un catálogo, preferí pedir una partitura”.

Carmen Parra, pintora: “Cuando muere un artista, un músico, se crea un silencio en el universo. Cuando muere un amigo lo hace con un pedazo de nuestra vida compartida en este peregrinaje del mundo del arte y la imaginación, cómplice y compañero del siglo XX y XXI. En el cielo los únicos ángeles artistas son músicos. Lo recibirán con un gran Réquiem. ¡Buen viaje a la eternidad, Mario!”

Iván Restrepo, periodista y ecologista: “Era sencillo, generoso, solidario y excelente maestro de los nuevos valores de la música mexicana. Fue solidario, además, cuando hubo el recorte en la Fonoteca Nacional. En 1967, otro compositor, mucho mayor que él, Joaquín Gutiérrez Heras, predijo que: ‘este joven será uno de los mejores compositores de México’. No se equivocó”.

El compositor Arturo Márquez: “Se va uno de los grandes. Mario Lavista, desde muy joven, ha representado a la composición en México de muchas maneras. No solamente como compositor ha dejado obras fundamentales en el repertorio de la música mexicana, sino también como maestro, como editor y como una voz fundamental en la música de México”.