“¡Se está quemando el mercado!”, fue el grito desgañitado que alertó a los locatarios del pasillo 4 del mercado Sonora –a las 10:53 de la mañana– cuando las llamas comenzaron a consumir ocho locales, dos de los cuales operaban como cocinas económicas, dos vendían artículos religiosos y esotéricos y cuatro forrajeros, sin que resultaran personas fallecidas ni lesionadas; sólo cinco recibieron primeros auxilios por crisis nerviosas.
Locatarios y bomberos entrevistados coincidieron en que la conflagración se inició por un cortocircuito en uno de los locales dedicado a la venta de artículos religiosos, que en la planta alta almacenaba productos de madera, resina, cartón, papel y cerámica.
Omar González, quien desde hace 30 años vende disfraces de temporada, dijo que al escuchar los gritos y ver correr a las personas entre los pasillos, abandonó su puesto y a los clientes que atendía; tomó el extintor del local y corrió unos cinco metros para ayudar a apagar las llamas.
Con polvo verde en la frente, del monóxido de carbono del extintor, dijo sentirse “frustrado” porque junto con los locatarios les fue imposible sofocar las llamas que se propagaron en cuestión de segundos.
Por la parte trasera del mercado, en el callejón Canal, colonia Merced Balbuena, en Venustiano Carranza, 60 bomberos ingresaron con sus mangueras y estacionaron unos 20 carros, con lo que lograron confinar, controlar y extinguir el siniestro. El director general del Heroico Cuerpo de Bomberos, Juan Manuel Pérez Cova, dijo que lo prioridad fue confinar el fuego que se extendió unos 100 metros cuadrados, en medio del área de cocinas, lo que aumentaba el riesgo por las instalaciones de gas, y del pasillo donde están a la venta animales como gallinas, gatos, pericos australianos, loros, codornices, chivos y borregos, entre otras especies.
Pérez Cova indicó que los bomberos llegaron al mercado dos minutos y medio después de recibir la alerta, porque la central se ubica a un costado; además, fueron guiados por los comerciantes para ingresar al sitio exacto de la conflagración, que fue sofocada después de 35 minutos.
En contraste, algunos locatarios acusaron que los vendedores ambulantes que ocupan los estacionamientos ubicados en Fray Servando Teresa de Mier y la calle San Nicolás obstaculizaron la entrada de los bomberos.
Cuando el incendio estaba controlado, los comerciantes se confrontaron a empujones con policías que intentaron resguardar el acceso al mercado para evitar accidentes. Al final, los vendedores lograron entrar para sacar parte de la mercancía. Efectivos de la Secretaría de la Defensa Nacional resguardaron el inmueble.
El titular de la Agencia de Atención Animal de la Secretaría de Medio Ambiente local, Carlos Esquivel, dijo que atendieron a 35 gatos y dos gallinas, mientras un gato murió por aplastamiento al encontrarse en una jaula con más animales y por las condiciones precarias de salud.
La alcaldesa de Venustiano Carranza, Evelyn Parra, presumió que se salvaguardó a más de 400 comerciantes, luego se reunió con los locatarios afectados para evaluar las pérdidas y aplicar el seguro. Los comerciantes dijeron que mañana sábado reabrirán el mercado.
El gobierno capitalino señaló que analiza los daños ocasionados para determinar el apoyo que se otorgará a los locatarios afectados, además de que se iniciarán mesas de trabajo con los comerciantes para tratar el tema de la venta de animales. Mientras la Fiscalía General de Justicia local inició una carpeta de investigación por el delito de daño a la propiedad.