La vacuna rusa Sputnik Light, de una sola dosis, demostró una eficacia de 70 por ciento para prevenir la infección por la variante delta del coronavirus y cuando se aplica como refuerzo de biológicos diferentes, evita 83 por ciento el contagio y más de 94 por ciento la hospitalización. Los datos son del Centro Nacional de Investigación en Epidemiología y Microbiología Gamaleya y se publicaron en la revista científica The Lancet.
El artículo precisa que la acción del biológico contra la variante delta ocurre en los primeros tres meses después de haber sido aplicado y en personas menores de 60 años, la eficacia es de 75 por ciento.
Resalta Sputnik Light, que contiene el primer componente de Sputnik V, el adenovirus (Adn) 26, comprobó ser mejor en comparación con vacunas de dos dosis, en específico aquellas que frente a la variante delta –con mayor capacidad de contagio y de mayor circulación durante la tercera ola de la pandemia en México–, su efectividad baja a menos de la mitad.
La publicación presenta los resultados del estudio sobre seguridad, tolerabilidad y la capacidad de generar respuesta del sistema de defensas (inmunogenicidad) ante el SARS-CoV-2, de la vacuna Sputnik Light. Se confirmó que el biológico induce “una fuerte respuesta inmunitaria humoral y celular” en personas que no han estado expuestos a la cepa, así como en los seropositivos.
El Centro Gamaleya recordó que el uso de Sputnik Light está autorizado en más de 15 países y el proceso de registro está en curso en otros 30. El estudio se realizó con la participación de 28 mil personas en Moscú. También se llevó a cabo una investigación en el mundo real en Argentina, donde el producto demostró una eficacia de entre 78.6 a 83.7 por ciento en adultos mayores. En tanto, en Paraguay, el resultado es de 93.5 por ciento durante la campaña de vacunación en curso.