San Cristóbal De Las Casas, Chis., Los integrantes de la caravana de migrantes permanecieron ayer en el municipio de Pijijiapan, donde niños y mujeres, principalmente, recibieron atención médica, informó Luis García Villagrán, director del Centro de Dignificación Humana.
En entrevista telefónica, dijo que “el sector salud no se da abasto para atender a los enfermos”, sobre todo infantes y mujeres que resienten los efectos de la caminata después de 11 días.
“Sus condiciones de salud están deterioradas. Estoy tratando de solventar ese asunto, pero es casi imposible, además de que el hospital y el sector salud en general de Pijijiapan no se dan abasto. Todos estamos fregados”, expresó.
Manifestó que “la atención en Pijijiapan ha sido mil por ciento diferente” a la que los extranjeros, principalmente centroamericanos, recibieron en el vecino municipio de Mapastepec –“ni agua nos dieron”–, ambos gobernados por Morena.
“Aquí les trajeron comida las iglesias cristianas evangélicas, ropa, pescado. Una cosa increíble, sorprendente. Una atención médica diferente. Pareciera que estamos hablando de dos países distintos”, destacó.
Insistió: “la realidad es que los niños están muy enfermos y no se pueden recuperar en unas horas o en un día. Lo importante es la atención integral del Estado mexicano; no nos pueden dar un vaso de agua y un pan, lo que esta gente requiere es atención integral para todos, no sólo para unos cuantos; eso es lo que estamos pidiendo”.
García Villagrán explicó que el contingente acordó pernoctar en Pijijiapan y reanudar este jueves su camino hacia Tonalá.
En tanto, fuentes oficiales informaron que dos de los migrantes baleados el domingo en Pijijiapan por agentes de la Guardia Nacional continúan internados en hospitales de Tapachula y Tuxtla Gutiérrez y su estado de salud es delicado.