Tepetlaoxtoc, Méx., Pobladores de la cabecera municipal de Tepetlaoxtoc, junto con integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) de Atenco, exigieron a las autoridades suspender la construcción del cuartel de la Guardia Nacional en un predio de casi una hectárea.
Los inconformes afirmaron que el terreno es una área deportiva y comunal y pidieron que sea respetada, aunque aclararon que no están en contra del cuartel.
Alrededor de las 9 horas del miércoles, el grupo de 50 personas se manifestó frente a las obras, ubicadas a un costado del auditorio de la comunidad.
Trataron de ingresar para detener los trabajos de edificación; pero un grupo de efectivos de la Policía Militar los detuvo. Por un momento se dio un conato de bronca que no pasó a mayores.
Los colonos acusaron a la presidenta municipal, la morenista Eva Bustamante, de no tomarlos en cuenta para la instalación del cuartel, y demandaron su reubicación.
“La alcaldesa no se tomó la molestia de hacer una asamblea ni informar a los delegados. A ningún ciudadano le preguntaron y hoy venimos aquí para expresar nuestra molestia, mostrada desde hace cuatro meses, sobre todo porque el pueblo no solicitó la obra”, afirmó Arturo González, vecino del lugar.
Mencionó que no quieren conflictos, pero tampoco van a permitir la imposición de proyectos. “Se les dijo con tiempo que estaban transgrediendo los derechos de los habitantes y no nos hicieron caso”, agregó.
En la protesta participó Ignacio del Valle, dirigente del FPDT, quien destacó que la lucha es por defender lo que por derecho corresponde al pueblo.
En agosto pasado, la Secretaría de la Defensa Nacional y el ayuntamiento firmaron un convenio para instalar el cuartel de la Guardia Nacional a un costado del auditorio de la zona centro.
El edificio albergará a 120 elementos; tendrá dormitorios para hombres y mujeres, cocina, baños, salón de usos múltiples, cancha de basquetbol y una planta de tratamiento de agua, así como una barda perimetral y casetas de vigilancia.
A mediados de agosto, los inconformes pararon la obra y bloquearon los dos accesos para impedir la entrada de camiones a la zona de construcción. A partir de ese día se integró una mesa de diálogo; sin embargo, continúa suspendida.