La presidente del Senado, la morenista Olga Sánchez Cordero, presentó un punto de acuerdo para exhortar a los congresos de los estados a armonizar su legislación con el artículo 45 de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes a fin de garantizar que la edad mínima para contraer matrimonio sea 18 años.
La legisladora resaltó que en México la tasa de incidencia de matrimonio infantil afecta a 4.45 por ciento de las adolescentes entre 12 y 17 años de forma anual, según un informe elaborado por la ONU. Dicha cifra implica que más de 25 por ciento de las mujeres mexicanas habría iniciado un matrimonio infantil o unión temprana desde los 12 a 17 años, lo que sitúa a nuestro país como una de las naciones de América Latina con mayor prevalencia en el tema.
La senadora subrayó que la desafortunada realidad que acompaña a este tipo de prácticas implica una estrecha relación con la desigualdad, no solamente económica, sino fundamentalmente de género. La reproducción del matrimonio infantil contribuye a perpetuar roles económicos y de género que resultan en una afrenta para la salud e integridad de las niñas y los niños. Las siguientes cifras otorgan un panorama general de la desigualdad como componente del matrimonio infantil en México. Según cifras del Inmujeres, 30.9 por ciento de las mujeres que habitan en zonas rurales se casaron o unieron antes de cumplir 18 años, mientras en zonas urbanas la cifra se reduce a 18.9 por ciento.
En 2016, en México había 10 millones 239 mil 584 mujeres que se casaron o unieron por primera vez antes de los 18 años, de acuerdo con información de la Encuesta Nacional sobre la dinámica de las relaciones de los hogares, del Inegi. Sánchez Cordero resaltó que en promedio se casan 60 veces más mujeres menores de 15 años que hombres y seis veces más mujeres de 15 a 17 años que hombres.
En el punto acuerdo, la ex ministra apuntó que 42.8 por ciento de adolescentes mujeres entre 12 y 17 años que están casadas tienen al menos un hijo; además, que 72.4 por ciento de adolescentes entre 12 y 17 años que están casados no asisten a la escuela (77.3 por ciento de mujeres y 56.1 por ciento de hombres).
Sánchez Cordero hizo hincapié en que la reproducción del matrimonio infantil contribuye a perpetuar roles económicos y de género que resultan en una afrenta para la salud e integridad de niñas y niños.