Al menos 22 de los 30 elementos de élite de la Marina que participaron en acciones contra el crimen organizado en Nuevo Laredo, Tamaulipas, y que hoy son investigados por la Fiscalía General de la República (FGR) por la desaparición forzada de cuatro personas en esa ciudad fronteriza, recibieron entrenamiento por parte de agencias de Estados Unidos.
En abril de este año, autoridades mexicanas arrestaron a 30 efectivos de la unidad de fuerzas especiales de élite de la Armada de México, relacionados con esos hechos.
La mayoría de este grupo, reveló ayer el medio internacional VICE World News, que fue capacitado en distintas tácticas por parte de personal estadunidense, de acuerdo a documentos y personas familiarizadas con el caso.
De los marinos detenidos, 22 asistieron a 88 “eventos de entrenamiento” financiados por los Departamentos de Defensa y de Estado de Estados Unidos entre 2011 y abril de 2020, según la información. Los cursos cubrieron temas que incluían conducción táctica, operaciones en la jungla y derechos humanos.
Además, 13 participaron en 17 eventos de capacitación con financiamiento estadunidense tanto durante como después de la época en que supuestamente secuestraron y asesinaron a civiles en Nuevo Laredo.
En una declaración escrita para el medio, el Departamento de Estado afirmó que cualquier individuo o unidad implicada en una “violación grave de los derechos humanos” no puede recibir capacitación ni ninguna otra asistencia financiada por Estados Unidos. De su lado, el Departamento de Defensa dijo que no selecciona qué unidades extranjeras entrena, dejando esa decisión al país anfitrión.
La FGR ha abierto 34 investigaciones sobre el secuestro y desaparición forzada de 47 personas durante el despliegue de seis meses de la unidad en Nuevo Laredo a principios de 2018.