Calavera a La Jornada
La Jornada murió de tiricia correteando la noticia
Metida ya en su sepulcro que más que fosa es trinchera hace periodismo pulcro con guadaña justiciera.
Conservadores zoquetes de su entorno, en el osario, nomás sus piquetes torean protegiendo el silabario.
Su valor es tan preciado, en medio de tanta insidia, que, quienes la han deturpado, ya se murieron de envidia.
Francisco Zúñiga Canales
“Andrés Manuel, ángel de bien”
Ángel de bien a muchos mexicanos; Necios otros, huérfanos de memoria, Desconocen y niegan esta historia, Ruines mezquinos, perversos enanos, Engañan, mienten, roban a hermanos; Sabio tiempo que anunciará victoria.
Música y palabra que endulza el alma, Aliento de amor por la raza humana, Nutre energía para conservar la calma. Un maestro del decir en la mañana Escucha al pueblo toda la semana Leal, honesto y justo como ser de luz.
Pd. Acróstico rimado como calaverita para un vivo. Vivo: el Presidente de México.
Daniel Moctezuma J.
Calavera a Claudia Sheinbaum Pardo
Desde adolescente demostró ser luchadora social incansable Férrea militante de izquierda Estudiosa y muy responsable
Sus inquietudes y científicas querencias la indujeron a estudiar y graduarse Dentro de la UNAM, en la Facultad de Ciencias
Ante los intentos privatizadores de Jorge Carpizo, entonces de la UNAM Rector, Sheinbaum Pardo no dudó y junto con muchos otros el CEU fundó
Con esa rebeldía que inundaban Nuestros jóvenes corazones Nos declaramos en huelga y rescatamos nuestra universidad de los intentos privatizadores
Contra la privatización de Pemex Claudia Sheinbaum a las “Adelitas” dirigió y encabezó, porque un Estado democrático y popular es la aspiración
Ante las adversidades, Claudia nunca se ha doblegado y ahora en el gobierno de la Ciudad de México, justicia, seguridad y democracia seguramente serán su legado
La parca, al percatarse que ni el juego sucio ni las artimañas que hay en su derredor logran abatirla, con guadaña en mano le susurró: Hoy estás de suerte, porque ya no batallarás con nadie del gabinete, porque ahora te está llevando la muerte.
Nicolás González González
Los muertos que viven en nosotros
La exaltación a la muerte como defensa de la vida se convierte en una vinculación con el no ser que se prolonga en el que existe. El recuerdo es el vínculo. Así se ha entendido en los ritos ancestrales.
Los muertos viven en nosotros. Otras posturas, como la de Borges, creen por el contrario que en el velorio, el entierro y la tumba, se está exaltando al ser que fue, no a alguien que todavía es. En esas vertientes de proceder filosófico no entra la idea de lo que estamos viendo en estos días, apoderada la comercialización de un rito. Se ve a la gente desesperada comprando baratijas –que sí pasarán al olvido– en las grandes tiendas que desde agosto empezaron a atraer con su pan de muerto. Hay en ello la intención de hacer de los muertos el vínculo comercial muy propio de un sistema económico que produce muertes a granel con el fin de sacarles provecho.
Tere Gil
Del litio en la ley eléctrica
A raíz de la iniciativa de ley eléctrica que incluye cambios a los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución, se han escuchado pronunciamientos para desacreditarla.
Los argumentos esgrimidos por quienes se oponen a la reforma eléctrica quisieran ver al litio y sus minerales como cualquier otro elemento; sin embargo, ellos desprecian el carácter estratégico de estos materiales cuando pensamos en un futuro cercano y de lejano plazo. El litio está llamado a jugar este importante papel tanto en la fase de transición de los hidrocarburos hacia otras fuentes primarias como en un futuro en el cual se pueda contar con fuentes de energía inagotables como promete ser la fusión nuclear.
En la primera fase, la de la transición energética, cuando el almacenamiento de energías como la solar y la eólica sea imprescindible, las baterías de litio jugarán un papel central: los vehículos eléctricos harán crecer la demanda de este mineral a cifras multimillonarias. Esto hará de la explotación y procesamiento del litio un negocio que no debe quedar en manos privadas, sino en manos de la nación. La decisión de incluir este material como estratégico estaría así plenamente justificada. Pero aún hay otros aspectos que considerar.
En la segunda fase, cuando las energías limpias (hidráulica, solar y eólica) sean ampliamente explotadas y las plantas de fusión nuclear hayan ocupado un lugar, el litio también habrá de jugar un papel protagónico. Ya no sólo a través de las baterías para el almacenamiento de energía, sino también, por su participación, como elemento productor del tritio, tan necesario para los reactores de fusión.
La investigación acerca de estos minerales de litio y su posible explotación en fusión nuclear y otros materiales debe ser abordado por un centro de ingeniería del litio mexicano. La ley eléctrica que actualmente se discute en el Congreso de la Unión debe valorar estos y muchos otros argumentos.