El grafito es un mineral tan versátil que se puede encontrar en la punta de los lápices o en reactores nucleares. En un punto medio, al igual que el litio, es un elemento clave para la fabricación de las baterías de los automóviles eléctricos, por lo que hacia 2050, el Banco Mundial (BM) estima que su demanda se disparará alrededor de 500 por ciento.

A diferencia del litio, que en México apenas comienzan los trabajos de exploración, en grafito el país ocupa la undécima posición mundial en producción. No obstante, falta desarrollar un mercado interno para aprovecharlo, pues casi todo lo exporta a Estados Unidos, nación que lo usa en la fabricación de baterías eléctricas. Según un estudio del BM, debido a la transición global hacia el uso de tecnologías de energía limpia, el grafito forma parte de los minerales que tendrán mas demanda, junto al litio y al cobalto.

A raíz de esa publicación, Violeta Núñez Rodríguez, investigadora de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), indagó en el tema hasta encontrar que el grafito es otra pieza fundamental en la fabricación de las baterías eléctricas.

“Nos llevamos la sorpresa de que en las baterías eléctricas para el cátodo se necesita el litio y para el ánodo, el grafito. Más aún, México es uno de los principales productores de grafito del mundo, pero todo se lo lleva EU. Somos uno de los dos países que más abastecen de grafito a ese país, justo para sus baterías eléctricas”, apuntó.

Datos del Servicio Geológico de Estados Unidos señalan que la producción mundial de grafito en 2020 fue de mil 100 millones de toneladas, similar a 2019. El mayor productor de grafito es China, con 59 por ciento del total mundial, seguido de Mozambique, Brasil y Madagascar. En el lugar 11 se ubica México, con 0.8 por ciento del total global. No obstante, dicho organismo también ubica a México como uno de los países con más potencial en la extracción de este mineral, al colocarlo en el sitio nueve entre las naciones con más reservas del mundo, con 3.1 millones de toneladas.

Según la Cámara Minera de México, a nivel nacional, la producción de grafito durante 2020 fue de mil 461 toneladas, un decremento de 8.2 por ciento comparado con 2019. El valor de la producción fue de 9.5 millones de pesos, reduciendo en 4 por ciento comparado con 2019.

El BM no es el único ente que advierte sobre la relevancia del grafito en los próximos años, pues la consultora GlobalData estima un fuerte crecimiento en la producción hacia 2024 a consecuencia del auge de las baterías para autos eléctricos, donde dice, dicho mineral es un componente “fundamental”.

De acuerdo con el Anuario Estadístico de la Minería Mexicana 2019, Sonora es el único estado de México donde se produce grafito; además de tener un potencial de 1.6 millones de toneladas en reservas de grafito amorfo.

El 98 por ciento de las exportaciones de grafito mexicano tienen como destino Estados Unidos y el resto va a Guatemala y Alemania.

El potencial del grafito está identificado por el gobierno mexicano, pues en una presentación, Flor de María Harp, directora general del Servicio Geológico Mexicano, expuso que el grafito y el litio serán los dos minerales que tendrán el mayor crecimiento en su demanda, como resultado de la transición energética mundial.

Núñez Ramírez enfatizó que, de concretarse la producción de litio, México contaría con los dos minerales claves para la fabricación de baterías eléctricas; sin embar-go, después se necesitaría la inver-sión de una gran empresa que apor-te no sólo los recursos, sino conocimiento y desarrollo tecnológico.