Ciudad de México. Por considerar que el ofrecimiento para ser embajador en España pretende dividir a la alianza Va por México y al Partido Revolucionario Institucional (PRI), el Consejo Político Nacional del tricolor negó el permiso que solicitó Quirino Ordaz Coppel, quien fuera gobernador de Sinaloa, para mantener su militancia y colaborar con el gobierno federal surgido de Morena.
Si, a pesar de la decisión el ex mandatario acepta la invitación que le hiciera el 10 de septiembre el presidente Andrés Manuel López Obrador, se le iniciaría un proceso de expulsión que encabezará la Comisión de Justicia Partidaria, que desde ayer preside Samuel Palma.
El PRI informó que durante el debate que se abrió para analizar la petición, el diputado federal Augusto Gómez Villanueva afirmó que la solicitud presentada por Ordaz Coppel el 13 de septiembre busca “socavar la vida interna del partido e intenta sabotear la alianza que se ha logrado integrar con los partidos Acción Nacional y de la Revolución Democrática”.
Entre los argumentos que se han dado en contra de la licencia, la consejera Maritza Jiménez Pérez reclamó que el PRI en Sinaloa no se sumó al recurso de impugnación que se presentó contra los resultados de la elección del 6 de junio.
“Estos actos dañan y lastiman a nuestra militancia. El priísmo sinaloense debe sentirse ofendido porque (Ordaz Coppel) está más preocupado por buscar una chamba en vez de ver por los militantes. Usan siglas y la fortaleza de nuestros militantes cuando así les conviene.”
La vocera de ese partido y única diputada federal por Sinaloa, Paloma Sánchez, también votó en contra de conceder la licencia al ex gobernador.