El Covid-19 incrementó la orfandad en México, señala un estudio del Instituto Belisario Domínguez (IBD) del Senado, en el que se precisa que 244 mil 500 niños y adolescentes perdieron a su padre, madre o a ambos progenitores, así como a abuelos o a quien tenía su custodia o con quienes vivían, al fallecer durante la pandemia.
En la investigación se detalla que México está entre los diez países del mundo con más menores de 18 años que quedaron en la orfandad y respecto a América Latina es el que tiene el mayor número de huérfanos. Se destaca asimismo que, con respecto a América Latina, es el que tiene el mayor número de menores huérfanos por la muerte de uno o ambos padres. En esa situación se ubican 169 mil 500 niños y adolescentes y la mayoría de esa cifra corresponde a la pérdida del papá, lo que se explica por el hecho de que el Covid-19 atacó principalmente a varones, que no lograron sobrevivir al virus.
En el estudio titulado “La orfandad ocasionada por la pandemia”, el IBD resalta que en el mundo han sido los niños y adolescentes los más afectados por la pandemia, al quedar desamparados por la muerte de cuidadores primarios y secundarios, y de ahí que las respuesta de los gobiernos y las instituciones privadas sea fundamental para poder apoyar los huérfanos.
Países como India, Brasil, Estados Unidos, Perú y Sudáfrica han puesto en marcha políticas y programas para proteger a las niñas, niños y adolescentes que han quedado en la orfandad, se destaca en esa investigación publicada por la Dirección General de Análisis Legislativo del (IBD).
Se resalta, asimismo, que el gobierno mexicano otorga la beca Benito Juárez, un apoyo económico de 800 pesos mensuales a niñas y niños que han quedado huérfanos a causa de Covid-19, aunque este apoyo resulta insuficiente para cubrir las necesidades de los infantes.
Al respecto, el IBD advierte que se deben medir los impactos de programas específicos para contrarrestar los efectos negativos a largo plazo en menores huérfanos.
El IBD destaca que el tema preocupa a los senadores, toda vez que se han presentado 15 puntos de acuerdo relacionados con niños y adolescentes que perdieron a uno o a sus dos padres durante la pandemia. Las propuestas se encaminan a proteger a los menores y garantizarles el acceso a una vida digna.