Moscú. El suministro de gas natural ruso hacia Alemania vía Polonia, a través del gasoducto Yamal-Europa, se detuvo el sábado, según datos del operador alemán Gascade, aunque la compañía rusa Gazprom aseguró que las necesidades de los clientes europeos están siendo satisfechas.
Rusia envía gas a Europa Occidental por diferentes rutas, incluida la de Bielorrusia y Polonia, a través del gasoducto Yamal-Europa, que tiene una capacidad anual de hasta 33 mil millones de metros cúbicos.
Los flujos en el punto de medición de Mallnow, en el lado alemán de la frontera polaca, se detuvieron temprano el sábado, dijo Gascade. Un portavoz de PGNiG, el gigante del gas polaco bajo control estatal, constató que los flujos desde el este eran mucho más bajos de lo habitual, pero que Polonia todavía está recibiendo cantidades consistentes con su contrato.
Gazprom ha sido acusada por la Agencia Internacional de Energía y algunos diputados europeos por no hacer lo suficiente para aumentar sus suministros de gas natural a Europa, pero la compañía rusa ha dicho que ha estado cumpliendo con sus obligaciones contractuales.
Inquietud por el invierno
Los precios del gas en Europa se han disparado en medio de la recuperación económica y bajos inventarios.
El inminente cierre de uno de los dos gasoductos que llevan a España gas desde Argelia, su principal abastecedor, movilizó al gobierno y a las empresas suministradoras para evitar penuria durante el invierno.
El motivo es la interrupción del suministro por el gasoducto Gaz Maghreb Europa (GME), cuyos mil 400 kilómetros unen los campos de gas de Argelia, el mayor exportador de gas de África, a la península Ibérica, a través de Marruecos y el estrecho de Gibraltar.
España depende de Argelia para cubrir el 50 por ciento del consumo de gas natural que se emplea para el funcionamiento de calefacción, aire acondicionado, agua caliente, generación de electricidad, o como combustible para vehículos, entre otros usos.
El gasoducto GME, que transporta casi 10 mil millones de metros cúbicos (m³) al año, es una de las principales fuentes de suministro del país, muy dependiente de sus importaciones de energía a pesar de su posición de liderazgo en los sectores solar y eólico.
El contrato de utilización de este gasoducto está llegando a su fin y Argelia confirmó el miércoles que no lo renovaría, en el marco de una grave crisis diplomática con su vecino Marruecos, que se beneficia de los derechos de paso.
En los últimos meses, el precio de la energía se ha disparado en España, en un contexto mundial de alza. España, que también se abastece de gas natural estadunidense, ruso y catarí, se ha puesto en contacto con varios países exportadores para asegurarse el suministro, según una fuente cercana a las conversaciones.