Ciudad de México. México ha sido desplazado por China como el principal productor de flor de cempasúchil, pese a que en el país se encuentran 35 de las 58 especies de esa planta, originaria del continente americano y símbolo arraigado de la cultura nacional, resaltó el senador del PRI, Angel García Yañez.
El legislador propuso un plan emergente para impulsar la siembra de esa flor que en su gran mayoría se importa de China, “porque el cempasúchil sólo se cultiva aquí para ser utilizada en los altares domésticos, con que se conmemora el Día de Todos los Santos y el de los Fieles Difuntos, coloquialmente conocido como Día de Muertos”.
En un punto de acuerdo que se analiza en comisiones del Senado, pide a la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural (Sagarpa) poner en marcha un programa que impulse la siembra del cempasúchil en el campo mexicano, así como una mesa de diálogo entre esta dependencia y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, para la asignación de recursos financieros que fortalezcan a los productores agrícolas.
El senador García Yáñez destacó en la actualidad China domina la producción de esa flor, con las tres cuartas partes de lo sembrado en el mundo, le sigue la India, con 20 por ciento y Perú, con cinco por ciento. México, de acuerdo con cifras oficiales, sólo se siembran anualmente alrededor de mil 500 hectáreas de cempasúchil, por lo que ya no figura entre los principales productores de esa flor emblemática en el país y conocida como “flor de muertos”
Es decir, una producción aproximada de 14 mil toneladas que garantizan solamente su abasto para las festividades del primero y dos de noviembre, desaprovechándose el cultivo de flores para su uso industrial, con lo que se pierde la oportunidad de generar empleos y riqueza para los campesinos del país.
La flor de cempasúchil, dijo, tiene una gran importancia en materia económica, porque su abundancia en carotenos es utilizada en la industria alimentaria, al agregar n pigmentos de color amarillo al color de los huevos y a la carne de pollo. Sin estos, advirtió, los alimentos empalidecerían y serían menos atractivos para los consumidores.
Insistió en que el país pierde mucho, al producir esa planta sólo para las festividades de Día de Muertos y tener que importar al gigante asíatico la flor que necesita para uso industrial.
El senador priísta sostuvo que aunque existe una postura gubernamental de apoyo para el campo mexicano, ésta contrasta con la constante reducción de recursos públicos para el sector y por la ausencia de una política consistente para el desarrollo agropecuario y rural.