Roma. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, instó este sábado a los principales países productores de energía del Grupo de las mayores 20 economías del mundo (G-20) con capacidad sobrante a aumentar la producción para garantizar una recuperación económica mundial más sólida.
La petición se hace en medio de un amplio esfuerzo para presionar a la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus socios (OPEP+) para que incrementen el suministro de petróleo.
Con el alza de los precios del petróleo y el gas, algunos países productores como Rusia y Arabia Saudita no han impulsado la producción lo suficiente como para satisfacer a los que son en gran parte consumidores y están preocupados por la escasez de energía y la inflación.
El presidente francés, Emmanuel Macron, hizo eco de esas preocupaciones en una entrevista con el diario Financial Times e instó a la cumbre de líderes a impulsar una mejor “visibilidad y estabilidad de los precios” para evitar socavar la recuperación económica mundial posterior a la pandemia.
Los disparados precios del gas natural, con el índice de referencia europeo que ha subido casi 600 por ciento este año, se han visto impulsados por los bajos inventarios y la creciente demanda.
Un funcionario de alto rango de la administración estadunidense dijo después de la sesión del G-20 que las naciones consumidoras de energía habían comenzado a discutir qué pueden hacer si la OPEP y sus socios no producen más.
“Tenemos que poder hablar en privado con socios para pensar qué herramientas tenemos disponibles para lidiar con esto en caso de que la OPEP+ no intensifique y aumente la producción”, dijo el funcionario a periodistas en Roma.
A Rusia, un importante proveedor de gas natural de Europa, y su gigante energético Gazprom se les pide hacer más para reducir los precios en el mercado al contado.
“Es un momento delicado en la economía global, y lo importante es que los suministros de energía global sigan el ritmo de la demanda de energía global”, dijo otro alto funcionario de la administración de Biden antes de la reunión. “Hay importantes productores de energía que tienen capacidad sobrante y los estamos alentando a que la utilicen para garantizar una recuperación más sólida y sostenible en todo el mundo”.
Ese funcionario afirmó que los líderes del G20 no apuntarían específicamente a la OPEP, que incluye a Arabia Saudita, el mayor productor del mundo, ni establecerían objetivos para la producción de energía.
El presidente ruso, Vladimir Putin, no viajó a Roma para la cumbre.
Termina disputa comercial
Estados Unidos y la Unión Europea acordaron levantar los aranceles sobre el acero y el aluminio importados, poniendo fin a una disputa que tensó sus lazos comerciales desde que el ex presidente Donald Trump impuso los gravámenes en 2018.
El acuerdo fue anunciado por la secretaria de Comercio, Gina Raimondo, quien dijo que el pacto “permite que volúmenes limitados de acero y aluminio de la Unión Europea (UE) entren a Estados Unidos sin aranceles”.
Sin embargo, no especificó el volumen de acero y aluminio europeo que se permitirá en Estados Unidos libre de impuestos.
Las medidas de represalia de la UE sobre productos emblemáticos como las motocicletas Harley-Davidson, los vaqueros Levi’s y el whisky –que debían entrar en vigor el primero de diciembre– no se aplicarán ahora, dijo Raimondo desde Roma, donde asistía a la cumbre del G-20.
El comisario de comercio de la UE, Valdis Dombrovskis, dijo en un tuit: “Hemos acordado con Estados Unidos poner en pausa nuestra disputa comercial sobre el acero y el aluminio... y lanzar la cooperación en un Acuerdo Global sobre Acero y Aluminio Sostenible”.
Trump impuso en junio de 2018 aranceles de 25 por ciento al acero y 10 por ciento al aluminio provenientes de varias economías, incluida la Unión Europea, al argumentar motivos de seguridad nacional.