Para que se den abusos, actos indebidos y hasta corrupción –entorno al proyecto de Agua Saludable para La Laguna– se requiere no sólo de la actitud del empresario, sino de la autoridad, y eso ya no se permite, advirtió el presidente Andrés Manuel López Obrador. En su conferencia matutina de ayer, confirmó la vigencia de dos amparos, y uno más en proceso, cuya pretensión es frenar la obra que resolvería la problemática del agua para uso humano contaminada con arsénico.
“Tenemos ahí oposición de políticos retrógradas, corruptos. Por sus intereses caciquiles están tratando de impedir que se lleve a cabo el proyecto”. Y recordó que apenas hace tres semanas, “acordamos que no iba a haber problema, pero son muy mañosos, están acostumbrados a tirar la piedra y esconder la mano”. Confirmó que para atender esa circunstancia decidió nombrar a Gabriel García, quien solicitó licencia en el Senado.
“Ya se terminó” la condonación de impuestos
El mandatario describió que, si hay asociación delictuosa entre autoridades y particulares, se pueden cometer abusos y puede haber corrupción. Para contextualizar sus dichos, refirió la decisión de prohibir la condonación de impuestos, “ya se terminó”, repuso al recordar cómo las grandes empresas, los bancos, que no pagaban impuestos al tramitar condonaciones bajo cualquier excusa, pretexto o argumento.
En el caso de los permisos de agua, lo mismo. El director de Conagua de (Vicente) Fox, antes de ocupar el cargo, era funcionario de la lechera Lala, recordó, y no obstante, ahora reconoció y agradeció a los empresarios estar “cambiando de actitud y es de sabios cambiar de opinión. En el caso de La Laguna ellos van a aportar de sus cuotas autorizadas, un volumen de agua, porque es urgente resolver el problema de la contaminación de arsénico en La Laguna. Entonces, todos tenemos que ayudar”.
Con dureza, señaló un punto de conflicto en aquella región “porque tenemos ahí oposición de políticos retrógradas, corruptos, que ni siquiera están entendiendo de que se trata de la salud del pueblo. Entonces, por sus intereses caciquiles y queriendo sacar raja, están tratando de impedir que se lleve a cabo el proyecto.
“Ayer tomé la decisión de nombrar a Gabriel García, que es senador, va a pedir licencia para hacerse cargo del programa de Agua Saludable, porque habíamos acordado de que no iba a haber problema, pero son muy mañosos, están acostumbrados a tirar la piedra y esconder la mano. Voy yo y me dicen: ‘No hay problema, aquí todos ayudamos’, y ahora ya hay dos amparos y están promoviendo otro más. Aquí vamos en su momento a decir quiénes se están oponiendo, pero no a los que logran manipular, sino a los jefes, a los manipuladores”.
–¿Quiénes son, presidente? –le cuestionó una reportera que se encontraba al fondo del sitio de la conferencia.
–En su momento, porque estoy planteando el asunto. Ojalá y cambien de parecer, porque hasta las piedras cambian de parecer.
Así, resaltó, una de las metas de su gobierno, “ya hay una separación tajante, clara, entre lo que es el poder económico y el poder político. El gobierno es de todos, es de pobres y es de ricos, es de los que viven en La Montaña de Guerrero y los que viven en Las Lomas, es de todos los mexicanos”.
También se refirió al Plan de Justicia Yaqui, que supervisará regresando de su viaje a Nueva York, lo mismo que las acciones para apoyar a toda la población de Cananea, de toda esa región, lo estamos haciendo, y también a Obregón y a Hermosillo, y a las ciudades fronterizas y a los que viven en la sierra, insistió.