Mexicali, BC. El gobierno de Baja California entregó a la empresa Comercializadora Don Cacahuato, S de RL de CV, radicada en Chihuahua, alrededor de 600 millones de pesos en cuatro contratos para la compra de despensas y desayunos escolares, y en todos los procesos fue la única compañía participante; además, el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) estatal compró los alimentos cuando los niños estuvieron en casa por la pandemia, de acuerdo con datos obtenidos de las propias licitaciones.
Al igual que el gobierno del morenista Jaime Bonilla Valdez, que concluye el 31 de octubre, el de su correligionaria Marina del Pilar Ávila Olmeda, quien asumirá el cargo el primero de noviembre, entregó a Don Cacahuato, cuando fue alcaldesa de Mexicali, cuatro licitaciones del DIF municipal para la compra de despensas y cobertores por 34 millones de pesos.
El DIF estatal, junto con la Secretaría de Integración y Bienestar Social (SIBS), licitó la proveeduría de despensas y desayunos en siete ocasiones, y en los cuatro contratos más grandes fue único postor Don Cacahuato; un proceso fue declarado desierta y en dos, que en conjunto apenas superaron 50 millones de pesos, pujaron tres empresas.
En 2020, Don Cacahuato ganó dos licitaciones, la primera mediante la Oficialía Mayor, aunque solicitada por el DIF estatal y publicada el 19 de marzo con el número OM-DIF-063-2020, por 77 millones 730 mil 120 pesos más IVA. El costo final estimado fue de 90 millones de pesos por desayunos escolares en beneficio de 49 mil 827 niños de 294 escuelas; cada platillo costó poco más de 30 pesos.
Cuando se dio a conocer el fallo de la subasta no estuvieron ni el oficial mayor ni el secretario de Hacienda, por lo que lo aprobaron sus suplentes, y por la compañía firmó su representante, Gilberto Alemán Luna, gerente de licitaciones de la empresa Cimarrón, otra de las razones sociales de la sociedad.
El Registro Público del Comercio refiere que la empresa cambió el objeto de la sociedad apenas el 23 de enero de 2020 –dos meses antes del primer contrato– bajo el folio mercantil electrónico 29860, en el cual se agregó el concepto “equipamiento e instalación de cocinas y preparación de alimentos”.
La segunda licitación de 2020 fue la OM-DIF-078-2020, publicada el 31 de marzo, 12 días después de la primera y dos días antes del fallo. Esta vez la puja fue por 119 millones 796 mil 100 pesos y también firmaron los mismos que participaron en la resolución.
Durante 2021 Don Cacahuato ganó dos licitaciones; la primera, para el suministro de 635 mil despensas, se publicó el 15 de enero y corrió a cargo de la Oficialía Mayor en favor de la SIBS.
Con el número 32065001-002-2021, la empresa ganó el contrato por 200 millones de pesos sin competencia. Sus representantes ni siquiera acudieron a la reunión del comité de adquisiciones, arrendamientos y servicios de Oficialía Mayor, en la cual se dio el fallo.
Gilberto Alemán Luna, representante legal de Don Cacahuato ante el gobierno de Baja California, aparece en los portales profesionales como “especialista en buscar en Compranet licitaciones, analizarlas y recabar toda la documentación para su presentación, llevar a cabo la firma del contrato, entrega de mercancía adjudicada, facturación y cobranza”.
El contrato OM-DIF-033-2021 fue publicado el 12 de febrero y el 26 de ese mes se otorgó el fallo a favor de la comercializadora Don Cacahuato, nuevamente bajo el concepto de “suministro de despensas para el DIF de Baja California”.
Sin embargo, el acta circunstanciada en la que se hace constar el fallo del comité de adquisiciones señala que la propuesta económica ganadora fue de 224 millones 200 mil 266 pesos más IVA (a una tasa de 8 por ciento) “sólo por el servicio de preparación de desayunos escolares”.
En el anexo F se menciona a las 294 escuelas beneficiadas, por lo que se puede inferir que se trata de desayunos escolares, los cuales fueron programados y licitados en febrero pasado, cuando las clases presenciales estaban suspendidas por la pandemia de Covid-19.
Comercializadora Don Cacahuato no solo vendió despensas y desayunos escolares cuando no había niños en las escuelas, sino también cobertores, según los contratos de adjudicación directa realizados por el DIF estatal BC-DIF-MXL-ADJ-RP-20-06 y el BC-DIF-MXL-ADJ-RP-20-07, ambos por 400 mil pesos.
La firma fue creada el 6 de julio de 2015 en la capital de Chihuahua; desde entonces Diconsa y los sistemas DIF municipales y estatales han sido sus clientes, según su página electrónica.
Originalmente surgió como comercializadora de dulces, fruta deshidratada, comida enlatada y artículos de oficina, pero hizo dos modificaciones a su giro comercial. Primero agregó la compra al mayoreo de alimentos y en la segunda, la preparación de alimentos.
La empresa fue constituida por Teodoro Martínez Ramos y el hijo de éste, Teodoro Octavio Martínez Ruiz. El primero es dueño de al menos 14 razones sociales (en algunas también participa su hijo): Cimarrón Nuts, Cimarrón Industrial, Cimarrón Chocolates y Dulces y Productora Cimarrón, entre otras, que además son proveedoras de suministros a Don Cacahuato.
Registros del portal de la organización no gubernamental QuienEsQuien, actualizado hasta 2019, muestran que de 2017 a 2019 la empresa obtuvo 86 contratos como proveedor a entidades de gobierno y obtuvo 439.6 millones de pesos; 81 de las transacciones fueron adquisiciones directas. Sólo ganó cuatro por licitación pública en 2017. En Baja California, con cuatro convenios sumó alrededor de 600 millones de pesos.
Del total de licitaciones hechas por el DIF estatal y la SIBS para la entrega de despensas y desayunos, únicamente en dos no participó la empresa de Teodoro Martínez.
En la primera, del 29 de enero de 2021 (32065001-003-2021), la empresa AB Alimentos Nutracéuticos Funcionales SA de CV ganó el contrato de “servicio para la preparación de desayunos comunitarios para la SIBS” por 26 millones de pesos más IVA.
Según el Censo Nacional de Gobiernos Estatales 2021, Baja California es la cuarta entidad más opaca, al contratar 44.4 por ciento de sus compras por adjudicación directa.