Ginebra. Para Asia, 2020 fue el año más cálido jamás registrado, indicó ayer la Organización de Naciones Unidas (ONU). Las condiciones meteorológicas extremas y los impactos del cambio climático durante el año pasado causaron la muerte de miles de personas, el desplazamiento de millones y provocaron costos por un valor de cientos de miles de millones de dólares, además de causar un gran daño a infraestructuras y ecosistemas.

En su informe anual sobre el estado del clima en Asia, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) señaló que la temperatura media en 2020 fue 1.39 grados superior a la media registrada en el periodo 1981-2010.

El calentamiento se notó en todo el continente, con temperaturas récord en Siberia, pero también en los océanos Índico, Pacífico y Ártico.

A finales de junio, hubo 38 grados en Verjoyansk, en el noreste de la Siberia rusa, la temperatura más alta conocida al norte del círculo polar ártico.

El informe también señala que las temperaturas en la superficie del agua en Asia aumentan a mayor velocidad que en el resto del mundo. En algunas partes del mar Arábigo o del océano Ártico, el incremento es tres veces superior a la media.

En cuanto a los glaciares situados en Asia, la OMM advierte que su retroceso se acelera y pronostica que “su masa disminuirá de 20 a 40 por ciento hasta 2050, lo que afectará la vida y los medios de subsistencia de 750 millones de personas.

“El desarrollo sostenible está amenazado. La inseguridad en la alimentación y el agua, los riesgos sanitarios y la degradación del medio ambiente van al alza”, alertó.

La OMM subraya que el cambio climático y los fenómenos meteorológicos extremos “causaron en 2020 la pérdida de miles de personas, desplazaron a millones y costaron cientos de miles de millones de dólares” en Asia.

Según sus cálculos, estos fenómenos provocaron pérdidas de 238 mil millones de dólares a China, de 87 mil millones a India, 83 mil millones a Japón y 24 mil millones a Corea del Sur.

“Los riesgos meteorológicos y climáticos, particularmente inundaciones, tormentas y sequías, han tenido repercusiones importantes en numerosos países de la región”, afirmó Petter Taalas, secretario general de la OMM.

En 2020, las inundaciones y tormentas afectaron a 50 millones de personas y causaron más de 5 mil decesos.

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