San Luis Potosí, SLP., El caso de Karla Pontigo Luccioto, de 22 años, quien fue asesinada el 29 de octubre de 2012 en del bar Play, donde laboraba, será atraído por la Fiscalía General de la República (FGR). Así lo dictaminó el juzgado primero de distrito con sede en esta ciudad, por existir conflicto de intereses de José Luis Ruiz Contreras, vicefiscal jurídico y encargado de despacho de la Fiscalía General del Estado (FGE).
La irregularidad se debe a que Ruiz Contreras es hermano de Julián Ruiz Contreras, el primer juez penal que llevó la investigación de Karla Pontigo y quien clasificó el feminicidio como homicidio culposo (delito con menor penalidad),
Aunado a lo anterior, José Luis Ruiz era el secretario particular de Miguel Ángel Covarrubias García, en ese entonces titular de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), quien efectuó las diligencias de las primeras investigaciones del caso.
Después de nueve años de reclamos de justicia, el juzgado instó a la FGR a ejercer su facultad de atracción en la investigación del presunto feminicidio de Karla. Una vez oficializado el trámite, la FGR se encargará de la indagatoria con perspectiva de género, informó Yesenia Valdez Flores, abogada de la Fundación para la Justicia y el Estado Democrático de Derecho y asesora jurídica de la familia.
Luego de acudir a la conmemoración del aniversario luctuoso de la joven, frente a la efigie instalada en su honor en la plaza de armas del centro histórico, Valdez Flores agregó que el crimen y la falta de justicia fueron denunciados por Candy Elizabeth Martell Sandoval, titular de la Unidad Especializada Multidisciplinaria e Itinerante en Materia de Género.
Por último, destacó que el acuerdo está fundamentado en los lineamientos emitidos por la primera sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en el amparo en revisión 1284/2015, en el cual se considera justificada la intervención de la FGR.
El día del crimen, el hermano de la víctima fue por ella en la madrugada. Como no salía, la llamó al celular, pero al no obtener respuesta intentó entrar al bar. Personal de seguridad le impidió el paso y después le dijo que pasara a recoger a su hermana porque había tenido un “accidente”.
La joven estaba en la oficina del gerente, tirada en medio de un charco de sangre; su hermano la cargó y cuando bajaba las escaleras llegaron socorristas de la Cruz Roja, quienes le dieron los primeros auxilios, pero murió en el hospital. La autopsia reveló que había sido violada, además de que presentaba más de 40 heridas, pero la entonces procuraduría estatal, tarde y de manera deficiente, abrió una investigación sólo por homicidio doloso contra Jorge Vasilakos, quien era el jefe de la víctima en octubre de 2012.