Un mejor desempeño del consumo privado y la recuperación en los niveles de empleo reactivarán la demanda de crédito al consumo, y se registrará un repunte en el mediano plazo, afirmó BBVA México.
Esto, toda vez que los altos niveles de inflación no tengan mayores efectos negativos en los crecimientos reales de los portafolios de financiamiento al consumo que otorgan los bancos a las familias mexicanas.
De acuerdo con un reporte elaborado por el área de estudios de la institución financiera, el saldo nominal del crédito vigente de la banca comercial al consumo en agosto presentó una disminución anual de 0.3 por ciento, lo que representó una contracción de menor magnitud a la observada los pasados 15 meses.
Sin embargo, detalló, en términos reales, la caída durante el octavo mes del año fue de 5.6 por ciento.
“El crecimiento nominal mensual del crédito al consumo fue de 0.5 por ciento y de 0.3 por ciento en términos reales, con lo cual se completa un semestre de crecimientos nominales mensuales. No obstante, si bien las variaciones nominales anuales en algunos segmentos que integran esta cartera han presentado un mejor desempeño, únicamente la cartera de adquisición de bienes muebles registró un crecimiento en términos reales durante agosto”, apuntó el banco.
Detalló que en el octavo mes del año, el crédito otorgado a través de tarjetas, que representa 36.2 por ciento del total de los préstamos al consumo, registró una caída anual nominal de 1.8 por ciento, lo que supone un “ligero” retroceso en el camino a la recuperación de dicho segmento, que había disminuido sostenidamente su contracción interanual desde marzo.
“Sin embargo, la variación mensual de esta cartera registró un crecimiento de 0.6 por ciento, el quinto mes consecutivo en terreno positivo. La flexibilización de las restricciones asociadas al manejo de la pandemia durante los próximos meses apunta a la consolidación de un mayor dinamismo en el consumo de los hogares”, refirió.
BBVA planteó que, los datos más recientes observados en el indicador de consumo privado en el mercado interno van en ese sentido, pues en julio de 2021 –última información disponible– registró una variación mensual de 0.1 por ciento.
“La recuperación sostenida del consumo privado es una condición necesaria para apuntalar un mayor dinamismo en el segmento que fomente la recuperación los niveles de saldos en tarjetas de crédito previos a la crisis sanitaria”, precisó.
En el caso del saldo vigente de los créditos de nómina, el banco expuso que hasta agosto se registró un crecimiento anual nominal de 3.4 por ciento, mayor al registrado el mes previo (2.7 por ciento) en tanto el saldo vigente de los créditos personales mostró una ligera mejoría, al registrar una caída de 7.3 por ciento, una menor contracción en comparación con la registrada en el mes inmediato anterior que fue de 8.3 por ciento.
“Dichos datos muestran una tendencia de recuperación en ambas carteras, ya sea por un mayor crecimiento o una menor contracción, contribuyendo conjuntamente a la mejoría en el desempeño de la cartera de consumo”, añadió BBVA.