De acuerdo con las estadísticas, los equipos que califican al último a la final son más exitosos que los que quedan de superlíder, resaltó Mario Trejo, ex directivo de los auriazules y testigo de la hazaña de 2004 de Pumas, cuando apenas se colaron a la liguilla y salieron bicampeones. Hoy está esperanzado en presenciar otra gesta ante el envión que vive el equipo del Pedregal.
“El plantel ya está cerca del repechaje, hay que disfrutar el triunfo; no obstante, vienen tres partidos complicados, ojalá se gane y el equipo avance, tiene los ingredientes: calidad, buen ambiente y el gran apoyo de su público. Además, quiero resaltar, Pumas es un rival muy difícil”, comentó.
El equipo de la UNAM está en el sitio 14 de la tabla general con 17 puntos, era colero, pero subieron sus bonos tras lograr triunfos ante Bravos de Ciudad Juárez, León y los Xolos, que le valieron para arañar la reclasificación. Ahora deberán buscar nuevos éxitos frente a Tuzos, Santos Laguna y Cruz Azul.
“La unión ha sido muy importante, los triunfos generan buen ambiente y unen, pero estoy seguro de que tienen los pies en la tierra, porque hay gente capaz y seria. Es conveniente disfrutar el triunfo; sin embargo, hay que analizar bien la situación y a cada rival en turno, no confiarse jamás. Creo que podremos ver dentro de poco a nuestro club en mejor posición”, abundó.
Trejo dio la razón a quienes critican el formato del torneo, “muchos dicen que ha disminuido la competencia; no obstante, las reglas ahí están, fueron acordadas por todos los miembros de la asamblea, no es culpa de nadie si hay más facilidades, sólo hay que aprovecharlo. Es lo que está haciendo Pumas que hasta hace muy poco estuvo en un lugar complicado.
“Pero mientras queden partidos por delante ¡hay que ganarlos!, sumar más puntos porque el equipo sigue más cerca de la parte baja que arriba, tener en mente la calificación y el que haya pasado malos momentos no demerita en nada el trabajo, sólo es ajustarse a las circunstancias”, reflexionó.
Por ahora, el también odontólogo ve como la principal fortaleza de la plantilla que dirige Andrés Lillini la integración y solidaridad que en la cancha están demostrando los jugadores. “Se nota, hay confianza, entendimiento, han retomado la garra que ha sido y debe ser la característica principal de este equipo. Eso se va acrecentando, consolidando con los buenos resultados y bueno, que llegue donde merece estar”.
Ponderó otro aspecto: “El público ha sido un factor importantísimo, le da ese grado extra a la competencia. El sentirte con tu gente que te apoya, que exige y empuja, es complementar el esfuerzo en la cancha… ¡qué coincidencia! con la afición presente es como ha conseguido los buenos resultados y le quedan dos juegos en casa”.