Ciudad de México. El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó hoy que, en la discusión del Presupuesto de Egresos de la Federación 2022, no puede haber “ningún tipo de negociación que afecte al pueblo” o que se eliminen recursos para el gasto social.

En su conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional, rechazó incluso que los cambios al gasto público planteados por la oposición en la Cámara de Diputados, sean moneda de cambio para que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) apoye, con sus votos, la reforma a la Constitución en materia de electricidad.

Si en la discusión de la reforma en el Congreso “damos pasos para atrás, ya se frena la transformación y vamos muy bien, se está avanzando”, señaló.

Insistió en que, con la reforma, no habrá privatización y acotó que se dejará a la iniciativa privada 46 por ciento del mercado, que equivale -dijo- “a todo lo que consume Argentina, pero no tienen llenadera, quieren todo. Quieren acabar con la Comisión Federal de Electricidad (CFE)”.

Afirmó que uno de los principales opositores a la recuperación para el país del sistema eléctrico es Claudio X. González, porque durante el sexenio de Carlos Salinas obtuvo una concesión para generar energía y venderla “a precios elevadísimos” a la CFE y “creo que la familia ya la vendió a Iberdrola”.

Ante la intención del bloque opositor, de reducir presupuesto a sus obras prioritarias, para rescatar programas sociales, cuestionó que hay molestia porque, por ejemplo, “no pudieron hacer la transa de construir el aeropuerto en el lago de Texcoco. Se les fue la oportunidad de hacer negocios. De modo que el proyecto de presupuesto que enviamos tiene que ver con la transformación de México. Es distinto a lo que impusieron”.

—¿No va a aceptar modificaciones? -se le preguntó.

—No se pueden quitar recursos al pueblo ni detener el desarrollo del país para beneficiar a minorías.

—¿Habrá negociación con el PRI para aceptar algunas modificaciones, a cambio de que pueda votar a favor de la reforma eléctrica?

—No, eso es politiquería. Antes se encerraban, negociaban en la cúpula, a espaldas del pueblo y siempre se ponían de acuerdo, porque les iba bien a los de arriba, pero les iba muy mal a los de abajo.

“Ningún tipo de negociación que afecte al pueblo”.

Sostuvo que “la inconformidad, el malestar, el enojo, está arriba. En los que vivían colmados de privilegios, el señor Claudio X González. Cómo no va a estar molesto, si estamos planteando una reforma eléctrica de la que él se benefició con Salinas… Les molesta mucho lo que hacemos. Cómo no le va a molestar, si él no quería que se detuviera la mal llamada reforma educativa”.

Aseguró que la reforma eléctrica es para beneficio del pueblo y además a las empresas “se le está dejando 46 por ciento del mercado, No hay ninguna expropiación, incluso la CFE les comprará hasta ese porcentaje de la energía que produzcan”.

Si se permite que dominen los monopolios, aseguró, podría ocurrir como en España, “el precio se va a ir a las nubes”.