Más de un año después de iniciada la pandemia de Covid-19, las pequeñas y medianas empresas –de los sectores más afectados por la crisis– aún enfrenta problemas de liquidez, y pese a ello no se atreven a solicitar nuevos financiamientos, aseguró Lamberto Corral, director general de Cualli Financiera.
En entrevista, el directivo de la sociedad financiera de objeto múltiple (Sofom), detalló que para resolver este problema de financiamiento es necesario que “como en los viejos tiempos, las instituciones de crédito nos sentemos uno a uno con el cliente para saber cuales son sus necesidades”.
Incluso, planteó, pese a que actualmente el mercado de crédito en México se ha transformado a un mundo cada vez más digital, las financieras no bancarias deben enfocarse en ofrecer a sus clientes productos de financiamiento “hechos a la medida”.
Se estima que en México 6 de cada 10 pequeñas y medianas empresas obtienen su primer financiamiento por medio de una Sofom.
“El mayor problema de todos los empresarios que tenemos es la liquidez, tienen sus proveedores, clientes, equipo de trabajo, pero sufren de liquidez. Al no tener una cultura de prevención o planeación, el pequeño empresario carece de liquidez, es el problema que se tiene actualmente, lo que escuchamos, es que no hay dinero para comprar, para participar en proyectos.”
Corral expresó que si bien las Sofomes actualmente se enfocan en dar la mayor cantidad de créditos a los empresarios de menor escala, que también fungen como los principales empleadores del país, con el fin de que puedan hacer frente a sus compromisos, estos tienen reticencia para solicitar un préstamo.
“Nosotros pensábamos que para esta etapa del año los préstamos ya estuvieran en sus niveles previos a la pandemia, pero no es así, aún hay incertidumbre de los microempresarios para solicitar un financiamiento, porque es necesario decirlo, nosotros tenemos el dinero, solvencia la hay, pero no están pidiendo”, aclaró.
“El cliente está temeroso, no están tomando riesgos como antes de la pandemia, no se toman nuevos productos financieros, no se abren a nuevos mercados, no abren un nuevo restaurante o una nueva sucursal, es decir, no salen a tomar recursos, y hay que decirlo, también hay empresas que ya quebraron. La cautela es el tema que nos provoca que no coloquemos como queremos”, agregó el director de Cualli.