Muchas industrias están explorando sus beneficios y probando sus limitaciones. ¿Es el bitcóin un esquema piramidal de alta tecnología o ya es una pieza importante en el sistema financiero mundial?
En la actualidad existen 12 mil activos digitales en el mundo, aunque sin duda el bitcóin sigue siendo el líder indiscutible al ser la criptomoneda más valiosa, pues en la semana que concluye saltó por encima de los 66 mil dólares, lo que provocó que su capitalización de mercado llegara a 1.08 billones de dólares. Otras criptomonedas líderes como ethereum, con 414 mil 192 millones dólares, y binance coin (71 mil 669 millones) también han experimentado ganancias significativas en días recientes, pero todavía se mantienen muy atrás, según datos de la página CoinMarketCap.
Binance, el ecosistema blockchain y proveedor de infraestructura de criptomonedas a nivel mundial, afirmó que el precio del bitcóin siguió una importante tendencia alcista al superar la barrera de su precio máximo histórico, cotizando a más de 66 mil dólares.
“El reciente impulso puede ser atribuido, en gran parte, a la muy anticipada aprobación de la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) de un fondo de futuros (ETF) del bitcóin”, aseguró Binance.
De acuerdo con su estudio: “Precio histórico, relacionado con una mayor adopción, las regulaciones y la innovación?”, la firma describió que cuando la SEC anunció la posibilidad de lanzamiento del mencionado fondo, el bitcóin comenzó a subir.
Unos días después ProShares, proveedor estadunidense de fondos de inversión, anunció el primer ETF del bitcóin en el mercado de valores de Nueva York, bajo la clave de cotización BITO.
Según la firma, BITO ofrece a los inversionistas la exposición a los retornos de bitcóin, a través de una cuenta de corretaje, por lo que se puede comprar y vender como una acción y eliminar la necesidad de una cuenta en un intercambio de criptomonedas y de una billetera criptográfica.
Sin autoridad central
Poco a poco, más empresas están cambiando sus políticas de pago y estudian aceptar el bitcóin como moneda de cambio. Por ejemplo, el fabricante de vehículos Tesla lo hará en el futuro. Recientemente trascendió que Volaris sería la primera aerolínea en aceptarlo como pago en El Salvador. Y se espera que las historias se sigan acumulando.
La tecnología blockchain surgió, en un principio, como una forma de garantizar las transacciones en línea del bitcóin y para permitir que dos partes pudiesen hacer negocios sin tener que conocerse entre sí y sin tener que confiar la una en la otra.
De acuerdo con la Universidad de Wharton, esta tecnología está diseñada sin una autoridad central en mente, como un banco o el gobierno, para supervisar las transacciones. Básicamente, el blockchain es un libro de contabilidad pública virtual compartida en que las transacciones encriptadas son confirmadas por partes externas.
En el mundo de las criptomonedas estas partes externas se llaman “mineros”, computadoras que resuelven problemas matemáticos complejos para confirmar las transacciones y ganarse comisiones. Las transacciones confirmadas se colocan en un “bloque” y se añaden a la cadena.
Una vez que el libro mayor es compartido con todos, se cree que es prácticamente imposible eliminar o modificar los datos, una premisa que ha resultado ser falsa en algunos casos.
“Increíble, alguien está enviando 100 dólares a Amsterdam a una persona desconocida y el dinero siempre llega al destinatario”. Eso es lo más sensacional respecto al bitcóin: es una operación entre dos personas no confiables que tiene un lugar en el sistema financiero mundial.