Barcelona. David Alaba y Lucas Vázquez marcaron los goles con los que el Real Madrid derrotó el domingo 2-1 al Barcelona, en el primer clásico de los dos gigantes del futbol español tras la salida de Lionel Messi.

El zaguero Alaba firmó un monumental gol a los 32 minutos, con un disparo combeado desde el costado izquierdo que hizo inútil la estirada del arquero Marc-André ter Stegen. Fue la culminación de un fulminante contragolpe, gestado por el propio Alaba desde el borde su propia área.

La anotación de Alaba se produjo minutos después que el lateral estadunidense Sergiño Dest desperdició la mejor ocasión del Barcelona en todo el partido al rematar por encima del travesaño tras quedar perfilado frente al arco.

Vázquez lo sentenció en el cuarto minuto de la prolongación en otra contra, con los anfitriones lanzados desesperadamente al ataque en busca del empate.

“Estoy feliz de ganar. El clásico es el partido más importante", señaló el técnico merengue Carlo Ancelotti, victorioso en el Camp Nou por primera vez.

“Ha sido un partido práctico. Este equipo tiene esta calidad de jugar a la contra y tenemos que disfrutarla", añadió Ancelotti. "El Barça nos ha complicado el partido. No era simple”.

El delantero argentino Sergio Agüero se estrenó como goleador azulgrana al anotar el tanto del descuento a un centro de Dest en los últimos segundos.

Fue la cuarta victoria del Madrid en el clásico, algo que no se daba desde una racha de siete triunfos sucesivos entre 1962 y 1965.

“Es una buena victoria, otro clásico ganado y para seguir ahí arriba es importante”, dijo el arquero belga Thibaut Courtois. “Ellos siempre van a estar ahí, la liga es muy reñida y hay partidos muy difíciles”.

El triunfo dejó al Madrid como líder provisional de la Liga, igualado en puntos con el Sevilla y la Real Sociedad. La Real podría quedar solo al frente tras el partido contra el campeón vigente Atlético de Madrid más tarde.

En cambio, el Barcelona se llevó otra cachetada en una complicada temporada. Sus problemas financieros le impidieron cerrar una renovación de contrato con Messi y otras figuras. El equipo de Ronald Koeman languidece octavo, cinco puntos atrás.

“Estoy descontento con el resultado. Creo que el equipo estuvo bien en la primera parte. Tuvimos la de Dest para adelantarnos”, dijo Koeman. "Creo que hemos dado la cara”.

Este fue el primer clásico sin Messi y Ramos — ambos compañeros a partir de esta temporada en el Paris Saint Germain.

Alaba, sustituto en la zaga merengue de Ramos, fue vital también en la zona defensiva cuando en la recta final del primer tiempo tapó una de las opciones azulgrana con un disparo a quemarropa del joven Ansu Fati dentro del área.

Los hinchas del Barcelona acudieron a presenciar el primer partido contra el Madrid tras el levantamiento de las restricciones por la pandemia, permitiendo llenar el Camp Nou — se registró un acceso de 80 mil 400 espectadores para una estadio con aforo para 99 mil. El jolgorio inicial acabó en abucheos en los últimos minutos al ser testigos de otra decepción de un equipo en transición.

De tener a Messi y Antoine Griezmann en el ataque por la derecha, los canteranos Gavi Páez y Óscar Mingueza pasaron a asociarse con Dest.

El Barcelona volvió a mandar en la posesión, pero el Madrid siempre se insinuó más peligroso al atacar.

Alaba le robó el balón a Depay y se embaló hacia la portería rival. Dos toques después, con Vinícius Júnior y Rodrygo, el ex Bayern Múnich definió como un delantero nato para facturar su primer gol como jugador del Madrid

“En estos partidos, el que marca primero tiene bastante ventaja. Así ha sido", resumió el volante azulgrana Sergio Busquets. "Es demasiado castigo para los méritos que hicimos. Ellos acertaron, sobre todo en la primera parte y luego estuvieron esperando alguna contra y nosotros no conseguimos muchas ocasiones”.