Vidrio obscurecido, la creación coreográfica más reciente de la Compañía El Cuerpo Mutable/Teatro de Movimiento, se presenta en las escalinatas, pasillos y salas de exhibición del Museo Nacional de Arte (Munal).
En un comunicado, la Secretaría de Cultura federal y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal) informaron que las presentaciones de la compañía que dirige Lidya Romero forman parte de las actividades presenciales de reapertura de espacios artísticos.
Para Romero, fundadora y directora de la agrupación, es vital regresar a las funciones presenciales después de año y medio de confinamiento debido a la pandemia de Covid-19. Expresó que le resulta emocionante hacer comunidad entre la obra y los espectadores. “Recordemos que la danza se genera y se presenta en comunidad. Es importante la presencia del público y este tipo de espacios públicos permiten un contacto más cercano con el espectador, así como un diálogo único entre la obra y el inmueble, muy diferente al que ocurre en un espacio tradicional”.
La obra Vidrio obscurecido, de Lidya Romero, surgió de un proyecto artístico social que se realizó en salas de espera de hospitales, y cuyo título era Reconfortarte. Antes de la pandemia, la creadora y los integrantes de El Cuerpo Mutable impartieron talleres en esos espacios, que al final dieron origen a la obra, la cual parte de la evocación, la nostalgia y la memoria.
La propuesta coreográfica forma parte del proyecto Mutantia: irrupciones y disrupciones, beneficiario del Programa MEGA, México en Escena Grupos Artísticos del Sistema de Apoyos a la Creación y Proyectos Culturales, del Programa de estímulos a la creación artística de la Secretaría de Cultura.
Sobre las presentaciones en el Munal, Romero explicó que se hizo una versión trabajada a partir de la original y redimensionada como intervención al espacio de este inmueble: “Nos da mucha ilusión presentar una versión especial para este museo, porque la hicimos pensando en sus espacios y en el tránsito del público.
“Es un montaje itinerante debido a que vamos a ocupar diferentes lugares del sitio, como salas, pasillos y escaleras. Esto genera una expectativa muy grande, porque no sabemos cuál será la reacción del público.”
Sobre su propuesta, Romero indicó que está articulada “alrededor de los recuerdos, la memoria y la nostalgia que vivimos en esta época de confinamiento. Todos, al estar recluidos en nuestras casas, hemos tenido oportunidad de tener momentos de introspección, como ver álbumes fotográficos, leer cartas, revisar prendas de vestir. Venimos de un encierro forzado donde hemos reflexionado y revisitado muchas cosas. “Estamos rodeados de recuerdos; esta obra es un ejercicio de memoria. Así que queremos que la obra encuentre resonancia en el espectador”.
Ramsés Carranco, Rocío Flores, Max Flores, Luisa González, Cinthia Portes, Elisa Rodríguez, Emmanuelle Sanders, Luis Valderrábano y Martha Elena Welsh son los intérpretes que participan en las funciones, los sábados y domingos a las 13 horas en el Munal (Tacuba 8, Centro Histórico), y que concluyen el 28 de noviembre.
Las presentaciones de la Compañía El Cuerpo Mutable/Teatro de Movimiento dieron inicio con el taller Intersticios, dirigido para todo público.