La iniciativa en materia eléctrica del presidente Andrés Manuel López Obrador “busca regresar al pueblo lo robado con la reforma energética de 2013, que desmanteló el patrimonio energético”, advirtió la secretaria general de la Unión Nacional de Técnicos y Profesionales Petroleros, Silvia Ramos Luna.
Al participar en un foro en la materia, organizado por Morena en el Senado, coincidió con otros especialistas del ramo en que la reforma constitucional del Ejecutivo federal debe respaldarse, ya que su intención es recuperar la rectoría del Estado en la generación, distribución y comercialización de la electricidad.
En ese evento, que forma parte de la campaña de Morena para la defensa de la iniciativa presidencial, Ángel Balderas Puga, analista en temas energéticos, coincidió en que la electricidad no es cualquier mercancía, sino un elemento fundamental para la seguridad nacional.
Ramos Luna denunció que las empresas generadoras despojaron de sus tierras a muchas comunidades en el Istmo de Tehuantepec y asesinaron a quienes se opusieron al despojo, mientras el resto de la infraestructura se abandonó para permitir que la industria privada siga ganando dinero.
Balderas Puga manifestó que a partir de la llegada de la actual administración, el Poder Judicial obstaculiza todos los intentos del Presidente para regular y recuperar, al menos, una parte del sector.
Juan Carlos Escalante, coordinador de la Asamblea Nacional de Usuarios de Energía Eléctrica, señaló que la propuesta de reforma es de gran importancia para el país, ya que apunta a la recuperación de un rubro fundamental para el desarrollo.
Por otra parte, en conferencia de prensa, el panista Damián Zepeda indicó que la reforma no sólo no bajará, sino que aumentará las tarifas eléctricas, porque da prioridad a la generación de energía cara y sucia, eliminando la competitividad.