Manuel Bartlett Díaz, director general de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), rechazó polarizar o manipular la discusión sobre la propuesta del Ejecutivo de reforma constitucional en materia eléctrica y de litio, como lo señaló el Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
A propósito del comunicado “Sí al diálogo respetuoso. No a la provocación ni a la polarización”, emitido por el organismo cúpula del sector privado, Bartlett Díaz consideró que se trata de una “catilinaria” sobre las declaraciones que hizo el lunes 18 de octubre, en una conferencia de prensa en la que expuso la visión de la CFE sobre la iniciativa de reforma.
Durante la reunión con medios nacionales Bartlett explicó con detenimiento el sistema eléctrico impulsado por (el ex presidente Enrique) Peña Nieto y asociados. “El CCE no analiza lo que dije, simplemente salta a la descalificación apocalíptica”, apuntó.
División social
Bartlett Díaz consideró que en su análisis demostró “que mediante las sociedades de autoconsumo los grandes consumidores de este país no pagan la red ni a la CFE, con daño patrimonial, que se constituye en monopolios privados mediante sociedades ficticias, en fraude a la ley”.
Insistió que el CCE “actúa como representante y defensor de las grandes empresas que no pagan, arropando a las sociedades de autoabasto. Eso no es una provocación, es una explicación detallada”.
“No es una polarización. No se está manipulando a ningún sector social, simplemente se les explica el atraco, que consiste en un sistema eléctrico del que se beneficia un sistema oligárquico”, destacó el director de la CFE.
“La división de la sociedad a la que se refieren se debe a que las empresas más grandes y poderosas de este país no pagan, mientras el resto de los empresarios, las clases medias y la población en general sí tienen que pagar”, puntualizó.
Después de que la titular de la Secretaría de Energía, Rocío Nahle García, presentó la reforma eléctrica en Palacio Nacional el pasado 11 de octubre, el CCE la acusó de no decir la verdad; el viernes 15 de octubre el director general de la CFE denunció que el organismo privado sirve a las firmas.