La Casa Betania Santa Martha, de apoyo a migrantes en Chiapas, fue allanada el pasado 12 de octubre por hombres que portaban armas largas y cortas, con lo que ya es la tercera vez que esto ocurre durante 2021. Sin identificación e incluso con la presencia en los alrededores de corporaciones policiacas estatales que no hicieron nada para detener la irrupción, ingresaron al lugar con el pretexto de buscar a una menor supuestamente desaparecida.
Ante esta irrupción al albergue, organizaciones como la Red Nacional Todos los Derechos para Todas y Todos, el Colectivo de Observación y Monitoreo de Derechos Humanos en el Sureste Mexicano y el Programa de Asuntos Migratorios de la Universidad Iberoamericana expresaron su preocupación y llamaron a “un alto inmediato a las agresiones y amenazas contra los integrantes y personas defensoras de derechos de los migrantes que trabajan en los albergues que brindan asistencia humanitaria”.
En su denuncia, los colectivos detallaron que el 12 de octubre, a las 19:30 horas, ocho desconocidos armados entraron en el refugio (cuyo funcionamiento coordinan cinco sacerdotes) para buscar a la menor. Sin identificarse, y sin ningún documento que justificara la irrupción, los hombres armados maltrataron al personal.
Esta acción se realizó de forma paralela al despliegue de policías y elementos de Protección Civil, los cuales “también llegaron al lugar mientras el allanamiento estaba en proceso, pero se abstuvieron de intervenir y tampoco levantaron denuncia o información formal sobre el allanamiento ilegal”.
Al justificar su exigencia de poner alto a estos ataques contra defensores de derechos humanos, señalaron que estos hechos se dan en un contexto en el que otras organizaciones defensoras de personas migrantes en la frontera sur de México, en particular en Chiapas y Tabasco, también han sido hostigadas y agredidas por su labor.