Ciudad de México. En medio de la noticia de que la economía de China se desaceleró, junto con los temores inflacionarios y la posibilidad de que estos lleven a un retiro del apoyo monetario a nivel global, el peso mexicano arrancó la primera sesión de la tercera semana de octubre con una depreciación frente al dólar.
La divisa mexicana se depreció 0.55 por ciento frente a su similar estadunidense para operar en 20.44 pesos por dólar en los primeros minutos de la sesión, luego de que la semana pasada alcanzó niveles de 20.3210 unidades.
El rendimiento de los bonos del Tesoro de Estados Unidos a 10 años escala a 1.62 por ciento y el índice dólar, DXY, se fortalece 0.1 por ciento, pues los inversionistas elevan su aversión al riesgo.
Los precios del petróleo también siguen con su rally al alza, el WTI avanza 1.4 por ciento; el Brent 0.9 por ciento, ante reportes que aseguran que miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) quedaron debajo de su meta de producción; el oro, activo financiero refugio, se debilita 0.2 por ciento.
Al tercer trimestre del año, la economía de China se desaceleró, al registrar una variación anual de 7.9 a 4.9 por ciento, ligeramente debajo de lo esperado por el consenso del mercado de 5.0 por ciento.
Las preocupaciones sobre la inflación afectan a los mercados accionarios estadounidenses y anticipan una jornada negativa de las bolsas. El precio del petróleo volvió a subir, al igual que el de las principales materias primas.
El Dow Jones cae 0.52 por ciento; el Nasdaq, 0.39 por ciento y el S&P 500 retrocede 0.50 por ciento. Siguiendo el sentimiento de Wall Street, la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) retrocede 0.08 por ciento, a los 52 mil 760 puntos.
Hoy arranca la temporada de reportes al tercer trimestre del año en México. Se esperan resultados mixtos en las empresas que cotizan en Bolsa.
Las bolsas europeas observan pérdidas generalizadas después de que el gobernador del Banco de Inglaterra (BoE), Andrew Bailey, reforzó sus argumentos para subir la tasa de interés próximamente, mientras la holandesa Phillips recortó su perspectiva para este año ante el desabasto de chips.