Cuando el partido El Salvador-México agonizaba y hubo la certeza de que no entraría al terreno de juego el zaguero del Génova Johan Vásquez, las redes sociales se activaron con reproches hacia Gerardo Martino con frases como “si no lo ibas a poner ¿para qué lo convocaste?”. El medallista de bronce en Tokio masculló su frustración y regresó a Europa. Pero fue cosa de tener la anhelada oportunidad para mostrar una vez más su valía; el domingo en su debut con el equipo italiano resultó pieza clave para evitar un revés.

En la fecha FIFA de octubre el Tata logró sacar las castañas del fuego, se mantiene en la cima del octagonal eliminatorio hacia Qatar, pero está lejos de haber convencido a los más exigentes. Su equipo funciona a impulsos, como una máquina vieja que caprichosamente se activa a ratos. Eso parece suficiente en la zona de Concacaf, aunque frente a Canadá sufrió lo indecible y con fortuna logró el empate, frente a una Honduras de muy bajo nivel lució a medias, pero ante la Selecta lo único rescatable es el resultado.

La defensa no es sólida, su ataque poco efectivo y el medio campo, intermitente. Sin embargo, donde no puede darse el lujo de fallar es en la zaga. Néstor Araujo y César Cachorro Montes han quedado a deber, mientras Jorge Sánchez se lesionó; de ahí el desencanto de no ver a Vásquez, quien enTokio llamó la atención en la mismísima tierra del catenaccio, donde el estratega del modesto club genovés, Davide Ballardini, parecía escéptico ante el oriundo de Navojoa, quien ya le despeja dudas.

La historia de Vásquez, de 22 años, es una muestra de paciencia y perseverancia, el central y lateral por izquierda debió digerir muchos sinsabores desde sus inicios. Los rechazos y desdenes en fuerzas básicas de Pumas, Tigres y Monterrey no lo desanimaron. Sólo su gran necesidad y arcas vacías hicieron que el equipo de la UNAM lo adquiriera a precio de ganga en 2020 y, ahora sí, lo pusiera a jugar. Jaime Lozano tiene mucho que ver en la historia que parece tornarse exitosa… Falta Martino.

A veces se dan buenos partidos en la desabrida Liga Mx. Fue el caso del Monterrey contra León el sábado en la reanudación del torneo, incluso genera expectativa hacia el cierre. León se plantó con determinación en la primera parte, después, los Rayados intentaron al menos empatar de todas las formas posibles, pero en su camino se interpusieron los postes en varias ocasiones y, sobre todo, Rodolfo Cota, quien estuvo en plan impasable.

Los regios se motivaron ante un gran rival y ambos equipos se fajaron; sin pedir ni dar tregua, mantuvieron a la tribuna rayada en tensión e incesantes lamentos, herida ante cada opción que fallaron los suyos. El directivo Jorge Urdiales no dominó su enojo y lanzó reproches al árbitro, pero, en general, la gente reconoció haber perdido en buena lid. Donde sí hubo rechifla fue en el estadio Azteca, porque Cruz Azul, pese a su lucha, sigue dando traspiés y no pasó del empate ante Tigres.

Enojo sembró el arbitraje en la tribuna del Atlético San Luis porque no le marcaron un penal. La legión charrúa se desconcertó tanto que descuidó la retaguardia y Roger Martínez aprovechó para marcar un golazo que tiene al América muy cerca de la calificación. Lo reprobable fue de nuevo la aparición de disturbios en torno al estadio Alfonso Lastras… Pumas empezó a esbozar lo que llaman en tono burlón “un cierre digno”, pero en la Liga Mx todo es posible, hasta una resurrección.

Hay fecha doble, martes y miércoles rebosan de partidos. El invento del repechaje aporta su cuota para avivar esperanzas hasta en los adormilados y le pone un poco de saborizante artificial al certamen varonil, porque en mujeres Tigres mantiene el dominio, a pesar de que esta semana rompió su paso perfecto al empatar con Chivas…. Hoy fue el día de Johan; sin embargo, Hirving Lozano estuvo cerca de anotar con el Nápoles; el Chucky sigue inspirado y en Italia le alabaron su gran actuación con el Tri. Raúl Jiménez está de buenas, no anotó pero los Wolves ganaron.