Ciudad de México. Tras permanecer más de un día en el aeropuerto de Estambul, Turquía, en espera de que su caso se resolviera, la familia afgana a la que el pasado jueves le fue negado el acceso a México y fue deportada, llega hoy a la capital del país, luego de que la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) acordó con el Instituto Nacional de Migración (INM) darle protección humanitaria.

La directora del Instituto para las Mujeres en la Migración (Imumi), Gretchen Kuhner, confirmó que el vuelo comercial salió de Estambul alrededor de las seis de la tarde de ayer y se tenía previsto que arribara hoy al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) aproximadamente a las 8:30 de la mañana.

Kuhner adelantó que en la terminal aérea la familia sería recibida por un par de amigos, quienes los han apoyado para que puedan permanecer en México.

En entrevista, expuso que esta experiencia ha sido “muy dramática” para la pareja afgana y “de mucha presión, por estar escapando de su país, no entender lo que pasa” y por haber sido “incomunicados” en distintos momentos.

Recordó que primero la familia, en la que se encuentra una mujer con siete meses de embarazo, estuvo detenida por 24 horas en el AICM, donde apenas pudo comunicarse con una amiga, quien fue la que contactó al Imumi para que los apoyaran. Después, dijo, fueron subidos a un avión de Turkish Airlines, que realizó una escala en Cancún, Quintana Roo.

Ahí, comentó, no se les permitió bajar de la aeronave y “les quitaron sus celulares y hasta sus zapatos”. Después, finalmente llegaron a Estambul, pero el objetivo era que la aerolínea los trasladara a Irán.

Kuhner expuso que ante todo lo vivido, la mujer embarazada manifestó problemas de salud como vómitos. Añadió que en el aeropuerto de Estambul fue la misma familia quien pagó todos sus servicios y alimentación, en tanto que el costo del vuelo de regreso a la Ciudad de México lo cubrió el Imumi.

La organización insistió en que si México no autorizaba el reingreso de estas personas, se hubiera concretado su deportación a Afganistan, “donde su vida corre peligro”.

El Imumi denunció el jueves pasado que el INM deportó a esta familia a pesar de que solicitó asilo y promovió un amparo para evitar su salida de territorio mexicano. En tanto que el organismo argumentó que fue enviada de regreso a Turquía porque al llegar al filtro en el AICM “incurrieron en inconsistencias al no acreditar los motivos de su viaje”, que según expresaron era “de turismo”.